Oferta de servicios
Nuestra experiencia
Experiencia sólida a nivel local, red extensa a nivel global
En el PNUD desempeñamos un papel fundamental en el desarrollo internacional como facilitador de conocimientos, creador de capacidades, impulsor de la innovación y promotor de intercambios en el debate global sobre el desarrollo.
Conectamos a los países con los conocimientos, los recursos y las redes que necesitan para lograr avances decisivos en materia de desarrollo. Nuestro trabajo se resume en nuestras seis soluciones emblemáticas, adaptadas al contexto e impulsadas por tres potentes catalizadores para lograr un mayor impacto.
Nuestros Centros de Políticas en todo el mundo brindan acceso a conocimientos especializados y ayudan a establecer conexiones con redes y recursos externos.
Respondiendo de forma integrada y coherente, estamos decididos a poner fin a la pobreza y el hambre, proteger el planeta de la degradación, garantizar que todas las personas disfruten de vidas prósperas con un crecimiento que se produzca en armonía con la naturaleza, y fomentar sociedades pacíficas e inclusivas.
Nos comprometemos a movilizar los recursos necesarios para aplicar la Agenda 2030 mediante la Alianza Mundial para el Desarrollo Sostenible revitalizada, basada en un espíritu de solidaridad mundial.
Soluciones emblemáticas
duplicar los esfuerzos PARA conseguir MEJORES RESULTADOS
Pobreza y desigualdad
Abordar la desigualdad de oportunidades invirtiendo en el desarrollo de capacidades para que las personas puedan superar el umbral de pobreza y continuar progresando.
Las industrias extractivas son clave para nuestra existencia. Los minerales son necesarios para las infraestructuras, la construcción, la fabricación, la productividad agrícola y la producción de energía limpia. Sin embargo, la extracción y el procesamiento de minerales tienen graves implicaciones medioambientales, sociales, económicas y de gobernanza. Proporcionamos asesoramiento político y asistencia técnica para maximizar los beneficios derivados del sector en términos de generación de trabajo decente y de ingresos fiscales necesarios para financiar la sanidad, la educación y la energía asequible. Al mismo tiempo, trabajamos para minimizar las pérdidas de biodiversidad, las violaciones de los derechos humanos y los peligros para la salud asociados a las industrias extractivas. Esto se consigue apoyando la formulación de políticas y legislaciones mineras, fomentando la capacidad empresarial de los pequeños mineros, y mucho más.
Las personas trabajadoras en empleo informal apenas se benefician de protección social ni de oportunidades para prosperar. Si no se les presta atención, esto conducirá a una mayor marginación y desigualdad. Apoyamos a los países para que desarrollen estrategias nacionales y subnacionales que integren cuestiones relacionadas con el futuro del trabajo, y para que diseñen y apliquen soluciones integradas que tengan en cuenta las cuestiones de género y a las personas jóvenes para proteger y empoderar a quienes dependen del sector informal.
La economía informal absorbe ocho de cada diez empresas del mundo. Más del 60 % de la población mundial empleada -aproximadamente 2.000 millones de personas- se gana la vida en la economía informal. A través de la iniciativa del Mecanismo para la Economía Informal (IEF, por sus siglas en inglés), estamos aprovechando la experiencia y los conocimientos de la Red Global de Políticas y de otros ámbitos para fomentar el pensamiento innovador y el aprendizaje colectivo sobre soluciones políticas y programáticas integradas que puedan ayudar a proteger y empoderar a las personas trabajadoras y las empresas informales, en particular a las mujeres y la población joven, facilitando al mismo tiempo su transición gradual a la formalidad.
A través de la colaboración entre nuestra Global Policy Network (Red Mundial de Políticas) y otros socios de las Naciones Unidas y de otras organizaciones, apoyamos el desarrollo y el uso de nuevos datos y análisis para que las políticas y los programas de desarrollo respondan mejor a las necesidades multidimensionales y diferenciadas de los hombres y las mujeres pobres y vulnerables, y para captar mejor las desigualdades de oportunidades y resultados.
En un contexto de crisis múltiples y en cascada, ampliar la protección social se ha vuelto más crítico que nunca para reducir la pobreza y la desigualdad. Ofrecemos soluciones para ayudar a los países a desarrollar sistemas de protección social inclusivos, responsables y con perspectiva de género. Aprovechamos los datos y los análisis, así como las soluciones digitales para identificar mejor las vulnerabilidades a las que se enfrentan las personas y las comunidades y mejorar el alcance de las personas más desfavorecidas. También trabajamos para que los programas de protección social respondan mejor a las crisis y contribuyan a reducir las vulnerabilidades derivadas del cambio climático y la degradación medioambiental, así como a apoyar transiciones justas. Consulta: Social Protection Offer (en inglés, Oferta de Protección Social)
Nuestra oferta a servicios comerciales forma parte integral de la estrategia del sector privado que busca que los mercados trabajen para los ODS, poniendo especial énfasis en las alianzas y la inclusión de las comunidades pobres y marginadas a través de programas a nivel mundial, regional y nacional. Proporcionamos inteligencia comercial y de mercado, y desarrollo de la capacidad institucional para permitir la formulación y aplicación de políticas inclusivas que sostengan la capacidad productiva y las cadenas de valor sostenibles.
Una población sana es fundamental para el desarrollo sostenible. Como socio de confianza del Fondo Mundial, desde el PNUD utilizamos su fortaleza operativa y política y sus relaciones con los gobiernos, la sociedad civil y otros socios para ayudar a los países a acceder a los recursos del Fondo para luchar contra el sida, la tuberculosis y la malaria y crear sistemas de salud centrados en las personas y resistentes en algunos de los entornos operativos más difíciles.
Para acabar con el sida, la tuberculosis y la malaria y abordar eficazmente otros problemas de salud, es fundamental contar con entornos jurídicos, políticos y normativos basados en pruebas y derechos y reducir la estigmatización y la discriminación. Apoyamos a los países para que creen entornos jurídicos, políticos y normativos propicios, amplíen los programas de acceso a la justicia para el VIH y la salud, fortalezcan la gobernanza multisectorial de las enfermedades no transmisibles y el control del tabaco, y amplíen la financiación innovadora para las respuestas al VIH y la salud.
Al menos la mitad de la población mundial sigue sin tener una cobertura adecuada de servicios sanitarios esenciales, y millones de personas siguen viéndose abocadas a la pobreza extrema por tener que pagar la atención sanitaria. Los que ya estaban rezagados se están quedando aún más atrás. Apoyamos a los países para conectar la innovación y la evidencia para hacer frente a las desigualdades en salud y la exclusión como parte de las respuestas multisectoriales y basadas en los derechos en materia de VIH y salud, que a su vez impulsan el progreso a través de múltiples ODS.
Los sistemas sanitarios de muchos países siguen siendo crónicamente débiles y se han visto aún más deteriorados por la pandemia de COVID-19. El mundo sigue sin estar preparado para futuras pandemias. Además, la crisis climática plantea un riesgo cada vez mayor para la cobertura sanitaria universal y los sistemas de salud, ya que puede dañar las infraestructuras, aislar a las comunidades de los servicios de salud esenciales y contribuir a la propagación de enfermedades. Ayudamos a aumentar la resiliencia de los países tanto para prevenir como para mitigar los riesgos de crisis y conflictos, así como para desarrollar un enfoque más integrado y sistémico de la salud humana, animal y medioambiental.
Gobernanza
Ayudar a los países a afrontar los desafíos emergentes con sistemas de gobernanza preparados para el futuro mediante enfoques prospectivos y una mejor gestión del riesgo.
La justicia es fundamental para prevenir y responder a los conflictos, las crisis y la fragilidad, para fortalecer el estado de derecho y para hacer realidad la ambición transformadora de la Agenda 2030. Promovemos y apoyamos un enfoque de la justicia centrado en las personas que tiene como objetivo garantizar que los sistemas de justicia y los servicios e instituciones de justicia estatales y no estatales sean justos, responsables, accesibles y capaces de prestar servicios de justicia de calidad para todos, sin dejar a nadie atrás. A través de Justice Futures CoLab (en inglés, Laboratorio para el Futuro de la Justicia), probamos, aprendemos y adaptamos soluciones innovadoras para aumentar el acceso a la justicia para todos, centrándose en las personas más excluidas, marginadas y vulnerables, las mujeres y las niñas, los migrantes y los desplazados.
La corrupción obstaculiza la conquista de los ODS al gastar recursos valiosos y degradar la calidad de los servicios públicos. Apoyamos a los países para que integren las estrategias anticorrupción (en inglés) en el desarrollo trabajando con los gobiernos, las empresas y la sociedad civil en el ODS 16, la rendición de cuentas social, la integridad empresarial y la innovación y la tecnología.
En 28 países de cinco regiones del mundo, apoyamos los gobiernos en la adopción de marcos políticos que promuevan prácticas empresariales responsables de acuerdo con los Principios Rectores sobre las Empresas y los Derechos Humanos de las Naciones Unidas. Desarrollamos las capacidades de las empresas privadas para llevar a cabo la diligencia debida en materia de derechos humanos. También colaboramos con tribunales, instituciones nacionales y defensores de los derechos humanos para desarrollar recursos efectivos para las víctimas de abusos.
Mediante el asesoramiento político y el apoyo programático, ayudamos a crear espacios inclusivos para el compromiso cívico (en inglés), al tiempo que reforzamos la capacidad de los actores de la sociedad civil para promover el desarrollo sostenible.
Las constituciones crean las instituciones, las normas y los mecanismos necesarios para una justicia centrada en las personas, la realización de los derechos humanos y el estado de derecho. Nuestro enfoque en la prestación de asistencia constitucional se basa en los principios fundamentales de inclusión, participación, transparencia y prácticas destinadas a maximizar la probabilidad de un resultado que sea respetado a nivel nacional y que tenga más posibilidades de alcanzar los objetivos de la paz sostenible y el desarrollo humano.
Los sistemas y procesos de gobernanza centrados en las personas, tanto a nivel nacional como local, son esenciales para crear y gestionar vías de desarrollo sostenibles y pacíficas. Con este fin, trabajamos para fortalecer las funciones y los sistemas básicos inclusivos y responsables necesarios para el funcionamiento del gobierno y la prestación de bienes públicos en contextos de fragilidad repentina o prolongada para que los gobiernos puedan responder mejor a las crisis y mantener la prestación de servicios.
Cuando se aplica correctamente, la transformación digital (en inglés) puede eliminar las barreras de acceso, reducir las cargas administrativas, apoyar una mayor transparencia y mejorar las interacciones entre los gobiernos y las personas. Ofrecemos apoyo normativo y programático, incluso sobre el uso ético de los datos, y apoyamos a nuestros socios en la transformación digital basada en los derechos.
Apoyamos a los estados miembros en la aplicación de la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad y las secciones pertinentes de la Agenda 2030 mediante una labor intersectorial transformadora y la incorporación de los principios de inclusión de la discapacidad (en inglés) en la labor normativa y programática, al tiempo que respaldamos la acción coordinada de todo el sistema de las Naciones Unidas en materia de discapacidad.
Apoyamos a los estados miembros en la organización de elecciones creíbles, inclusivas y pacíficas como requisito previo necesario para la gobernanza democrática. En asociación con el Departamento de Asuntos Políticos y de Consolidación de la Paz y otras entidades de las Naciones Unidas, somos el mayor proveedor de asistencia electoral (en inglés) del sistema ONU. A través de este apoyo, hacemos hincapié en el respeto de los derechos humanos y la igualdad de género y prestamos especial atención a las amenazas causadas por la contaminación de la información.
Los derechos humanos (en inglés) son una base necesaria para un mundo pacífico, próspero y sostenible y son fundamentales para alcanzar los ODS y anticipar, prevenir y recuperarse de las crisis. Incorporamos los principios y normas de derechos humanos en todos los ámbitos de política y programación de desarrollo. Hemos ayudado a los gobiernos de más de 100 países a cumplir con sus obligaciones en materia de derechos humanos y trabajamos con socios y partes interesadas para fortalecer los sistemas nacionales de derechos humanos.
La integridad de los ecosistemas de la información (en inglés) es esencial para unas democracias sanas y estables. La contaminación de la información dentro o fuera del ámbito digital está socavando cada vez más los valores democráticos. Desarrollamos estrategias y trabajamos con los gobiernos para hacer frente a los principales impulsores y facilitadores de la desinformación, protegiendo al mismo tiempo los derechos fundamentales a la información, la libertad de expresión y el compromiso cívico.
La meta 16.9 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible ("de aquí a 2030, proporcionar acceso a una identidad jurídica (en inglés) para todos, en particular mediante el registro de nacimientos") es clave para avanzar en el compromiso de la Agenda 2030 de no dejar a nadie atrás. Para ayudar a que esto suceda, fortalecemos la capacidad de los estados miembros para desarrollar sistemas integrales de registro civil desde el nacimiento hasta la muerte y de gestión de la identidad nacional.
Los gobiernos locales, la sociedad civil y las comunidades suelen ser los primeros en responder a las crisis y son los mejor posicionados para responder a las desigualdades, abordar las tensiones sociales y garantizar que las necesidades de las personas sean escuchadas e incluidas. Con el fin de aprovechar el potencial de consolidación de la paz y desarrollo de la gobernanza local (en inglés) para las comunidades afectadas por crisis y conflictos, proporcionamos apoyo especializado a los actores estatales, no estatales y comunitarios para la prestación de servicios locales eficaces e inclusivos, la planificación y la participación para responder a los complejos desafíos del desarrollo.
Unas instituciones y procesos eficaces, inclusivos y responsables, capaces de mantener la paz y garantizar el respeto de los derechos humanos y el estado de derecho, son fundamentales para asegurar un desarrollo sostenible que no deje a nadie atrás. Apoyamos a los parlamentos (en inglés) y a la sociedad civil en más de 60 países para que colaboren en el logro de los ODS.
Nuestro enfoque de la seguridad centrada en las personas es el principio rector de la programación de las Naciones Unidas en materia de paz y seguridad y para alcanzar la visión del ODS 16 sobre la promoción de sociedades pacíficas e inclusivas, el acceso a la justicia para todos y la creación de instituciones eficaces, responsables e inclusivas a todos los niveles. El apoyo estratégico al sector de la seguridad incluye dos pilares: 1) Gobernanza: apoyo al desarrollo de instituciones de seguridad transparentes, responsables y eficaces que respondan a las necesidades de los ciudadanos; y 2) Seguridad basada en la comunidad: mediante la participación de las comunidades locales. También desempeñamos un papel de liderazgo en la reducción de la violencia armada (RVA) a través de la Saving-Lives Entity (SALIENT): un programa mundial que ayuda a los países prioritarios a hacer frente a la violencia armada como parte de un enfoque integral de la seguridad y el desarrollo sostenibles a través de una perspectiva de género.
La gobernanza inclusiva y el estado de derecho son indispensables para promover sociedades pacíficas, justas e inclusivas y para garantizar el desarrollo sostenible. A través de Global Programme on Strengthening the Rule of Law and Human Rights for Sustaining Peace and Fostering Development (en inglés, Programa Mundial para el Fortalecimiento del Estado de Derecho y los Derechos Humanos para Manener la Paz y Fomentar el Desarrollo) prestamos apoyo político y programático integrado mediante financiación catalizadora, asistencia técnica y liderazgo intelectual, con el objetivo de transformar los sistemas, servicios e instituciones del estado de derecho, la justicia, la seguridad y los derechos humanos, así como el sector empresarial, para que sea más inclusivo, centrado en las personas y mejor capacitado para responder a las necesidades de justicia, seguridad y derechos humanos de todas las personas.
Hacer realidad la visión de la Agenda 2030 y lograr la consecución de los ODS a nivel local solo será posible mediante acciones integradas y coordinadas en todos los niveles de gobierno, población y sectores. Desempeñamos una función de convocatoria para promover la localización de los ODS (en inglés) en 170 países, utilizando nuestro alcance mundial, amplios conocimientos especializados y amplia experiencia en el apoyo a la descentralización, la gobernanza local y el desarrollo local.
Desarrollados en colaboración con el Agirre Lehendakaria Center, con sede en el País Vasco, España, las Plataformas de Innovación Social (en inglés) ofrece un enfoque sistémico para fortalecer los procesos de planificación del desarrollo local que sean inclusivos, participativos y resilientes. Las plataformas aprovechan los datos en tiempo real, el pensamiento de diseño centrado en el ser humano y una cartera de soluciones para abordar desafíos complejos a nivel subnacional y acelerar el logro local de los ODS.
Debido a que las personas jóvenes son una fuerza importante para el desarrollo sostenible y agentes clave para el cambio social, el crecimiento económico y la innovación tecnológica, promovemos y apoyamos el empoderamiento de este parte de la población para el desarrollo y la paz en más de 100 países y territorios. Nuestros programas se centran en la gobernanza inclusiva, la participación de las personas jóvenes en la toma de decisiones, el empleo juvenil, la consolidación de la paz, la igualdad de género y el papel de las personas jóvenes en la integración, la implementación y el seguimiento de los ODS.
Resiliencia
Ofrecer apoyo a los países y las comunidades para que fomenten su resiliencia ante las crisis, incluidos los conflictos, el cambio climático, las catástrofes y las epidemias.
Trabajamos para apoyar a los países frágiles y afectados por conflictos a través de soluciones integradas que aborden los impactos de la emergencia climática en los conflictos. Esto incluye a través del Mecanismo de Seguridad Climática con el Departamento de Asuntos Políticos de las Naciones Unidas, el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente y el Departamento de Operaciones de Mantenimiento de la Paz, y a través del apoyo programático a los gobiernos sobre la seguridad climática con énfasis en la prevención de conflictos y la consolidación de la paz a prueba de clima, y asegurando que la naturaleza, el clima y los esfuerzos energéticos contribuyan positivamente a la paz.
Apoyamos la creación de capacidades nacionales y locales para la paz mediante el desarrollo y el fortalecimiento de políticas, redes y mecanismos, incluida la ampliación del diálogo, la creación de consenso, la cohesión social y la mediación desde dentro. La oferta de servicios incluye la sensibilidad a los conflictos, el análisis de conflictos y las evaluaciones de cohesión social.
La Dirección de Gestión de Crisis apoya a nuestras oficinas en los países, a los centros regionales y al sistema de las Naciones Unidas en el seguimiento de los riesgos para el desarrollo y en la adopción de medidas preventivas. Esto se hace a través de: mapeo multidimensional de riesgos, agregación de datos, visualización y modelado, análisis contextual basado en la evidencia; apoyo a los mecanismos de exploración del horizonte; y promoción de la acción temprana.
Defendemos las iniciativas de alerta temprana y preparación para una acción preventiva eficaz ante las crisis, y como componentes básicos del fomento de la resiliencia y el desarrollo basado en los riesgos. Nuestras soluciones reducen el riesgo y facilitan una respuesta y una recuperación eficaces abordando los factores subyacentes y estructurales que impulsan el riesgo, construyendo una comprensión más profunda del riesgo multidimensional y fortaleciendo las capacidades institucionales y comunitarias para tomar decisiones informadas y actuar con prontitud.
El nexo acción humanitaria-desarrollo-paz es un reconocimiento de que se necesitan enfoques complementarios, coordinados y coherentes entre los actores humanitarios, de desarrollo y de paz para romper el ciclo de crisis. Codirigimos los foros mundiales sobre el nexo para mantener la voluntad política, prestamos servicios técnicos y de asesoramiento a las oficinas en los países a través de nuestra Red Mundial de Políticas, albergamos un servicio de asistencia y promovemos el aprendizaje entre pares. También dirigimos la Academia Nexus HDP, con el objetivo de crear una comunidad de 2.000 profesionales Nexus para 2026.
Abordamos los factores adversos de la migración irregular y el desplazamiento forzoso, fortalecemos la resiliencia de los migrantes, las personas desplazadas forzosas y sus comunidades de acogida mediante la promoción de la integración socioeconómica y la cohesión social, y ampliamos los beneficios para el desarrollo de la movilidad humana en los países y zonas de origen, tránsito y destino.
En colaboración con el Departamento de Asuntos Políticos y de Consolidación de la Paz de las Naciones Unidas, trabajamos para mejorar el apoyo de las Naciones Unidas a las partes nacionales interesadas en la prevención de conflictos y el mantenimiento de la paz.
Trabajamos con los países para reforzar su capacidad de hacer frente a las minas terrestres y los restos explosivos de guerra, llevando a cabo actividades de reconocimiento y retirada de minas, apoyando la reconstrucción, ejecutando programas de empleo de emergencia, ayudando a las víctimas, ejecutando planes de repatriación, educando sobre los riesgos de los artefactos explosivos, creando medios de subsistencia seguros y abogando por un mundo libre de minas.
Aprovechamos la capacidad nacional en 40 países utilizando un enfoque que abarca a toda la sociedad, en particular mediante la asociación con organizaciones de la sociedad civil, personas jóvenes, mujeres, organizaciones religiosas y sector privado. Nuestra cartera abarca el desarrollo participativo y el seguimiento de los Planes Nacionales de Acción de la Prevención del Extremismo Violento (en inglés); el retorno y la reintegración; el uso de las ciencias del comportamiento; la salud mental y el apoyo psicosocial; y la lucha contra la incitación al odio dentro y fuera de la red y las narrativas divisorias.
La Oferta de Prevención (en inglés) (2022-2025) tiene como objetivo articular nuestra ambición en materia de prevención y consolidación de la paz y promueve una sólida óptica de desarrollo que exige actuar con rapidez y a gran escala en la prevención de conflictos y crisis y en la consolidación de la paz.
Mediante el desarrollo de procesos de recuperación antes de que se produzcan los desastres, apoyamos la reducción del riesgo a través del fortalecimiento de las capacidades de los gobiernos nacionales y las comunidades para recuperarse rápidamente y reconstruir mejor, incluyendo los medios de subsistencia, la vivienda y la gobernabilidad. Apoyamos la preparación, la evaluación de las necesidades tras las catástrofes y los planes de recuperación resilientes.
Nuestro enfoque respecto al desarrollo basado en el riesgo es un esfuerzo de toda la organización que está profundamente arraigado en la gobernanza del riesgo, el pensamiento sistémico, los enfoques basados en áreas, los procesos ágiles y dinámicos, la gestión del riesgo y las soluciones específicas para cada contexto.
Nuestro objetivo es garantizar que las transiciones de las Naciones Unidas tengan como resultado que la ONU esté mejor equipada para afianzar los logros en materia de consolidación de la paz y proporcionar un apoyo eficaz a los países receptores a medida que pasan del conflicto a una paz y un desarrollo sostenibles.
Trabajamos en cuestiones de desarrollo sostenible y fomento de la resiliencia con gobiernos nacionales y subnacionales, agencias sectoriales y comunidades para ayudar a encontrar soluciones contextuales a los complejos retos del desarrollo.
Medio ambiente
Situar la naturaleza y el medio ambiente en el centro de los planes y economías nacionales y ayudar a los gobiernos a proteger, gestionar y valorar su patrimonio natural.
Nuestra iniciativa Climate Promise (Promesa Climática) es la mayor oferta mundial de apoyo a los países en sus compromisos climáticos nacionales en el marco del Acuerdo de París. Estos compromisos, o Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC por sus siglas en inglés), son pasos cruciales hacia las cero emisiones netas y el cumplimiento de los objetivos de París. Climate Promise apoya a más de 120 países, en colaboración con más de 35 socios, y es una importante contribución a la NDC Partnership. Trabajamos para ampliar el apoyo con el fin de consolidar la ambición de los países y ayudarles a convertir sus objetivos en acciones.
Los mercados de carbono, o financiación del carbono, pretenden mitigar las emisiones de gases de efecto invernadero creando un incentivo económico para reducir las emisiones de la forma más rentable posible, fomentando la transición a una economía baja en carbono.
La transformación hacia economías más resilientes, eficientes en el uso de los recursos y menos contaminantes exige desvincular el crecimiento económico del uso insostenible de nuestros recursos naturales. Las políticas de economía circular ayudan a acelerar el cambio para incentivar el consumo y la producción sostenibles. Ofrecemos apoyo experto para el diseño y la implementación de enfoques de economía circular y verde, aprovechando las fortalezas de convocatoria y nuestras alianzas con todas las partes de los gobiernos, el sector privado, la sociedad civil y otras partes interesadas.
Los bosques sustentan los medios de vida de más de 1.000 millones de personas y albergan la mayor parte de la biodiversidad mundial. Aportamos nuestra experiencia en la participación de las partes interesadas, las garantías sociales y medioambientales, la gobernanza, la coordinación institucional, la planificación estratégica, la aplicación de políticas y medidas para hacer frente a los factores que impulsan la deforestación, el acceso a financiación innovadora y el acceso a pagos basados en los resultados. También facilitamos las asociaciones necesarias para abordar los complejos elementos del proceso REDD+ (Reducción de las emisiones debidas a la deforestación y la degradación).
El cambio climático puede revertir los avances en desarrollo humano conseguidos con tanto esfuerzo, empeorar las desigualdades y desencadenar desplazamientos y conflictos. Sus efectos amenazan con sumir en la pobreza a 100 millones de personas más de aquí a 2030.
Estamos apoyando a más de 90 países, incluidos 17 pequeños estados insulares en desarrollo y 43 países menos adelantados, para acelerar la adaptación y aumentar la resiliencia climática. La clave de nuestra respuesta es promover soluciones integradas, multisectoriales y basadas en datos empíricos sobre el terreno, así como promover políticas y planes que tengan en cuenta los riesgos, para no dejar a nadie atrás. Al mismo tiempo, estamos ayudando a los países a acceder y desbloquear la financiación pública y privada que necesitan.
La degradación de la tierra, la desertificación y la sequía son obstáculos importantes y cada vez mayores para el desarrollo sostenible, ya que el cambio climático y la degradación del medio ambiente afectan a la salud humana, la productividad y la resiliencia. En apoyo de la aplicación de la Convención de Lucha contra la Desertificación, nuestro Centro Mundial de Políticas sobre Ecosistemas Resilientes y Desertificación (GC-RED) en Nairobi proporciona conocimientos técnicos y servicios de desarrollo de capacidades a los países para integrar las prioridades relativas a la tierra, la biodiversidad y el clima en la formulación de políticas y las inversiones públicas.
La diversidad de formas de vida y las soluciones basadas en la naturaleza son esenciales para hacer frente a múltiples retos de desarrollo: la crisis climática y de pérdida de biodiversidad, la desigualdad y la pobreza, la inseguridad y la migración. Trabajamos para aumentar el apoyo gubernamental, empresarial y público a la conservación de la biodiversidad, acelerando las acciones necesarias para el cambio sistémico y el logro de los objetivos mundiales de biodiversidad, a través de (i) apoyo a la programación, (ii) asesoramiento y apoyo técnico en materia de políticas y desarrollo de capacidades, y (iii) promoción. Los principales ámbitos de apoyo son la integración de la biodiversidad en la planificación y las prácticas de las políticas de desarrollo y sectoriales; el fortalecimiento de las zonas terrestres y marinas protegidas y conservadas y de las especies silvestres; la financiación de la biodiversidad; la gestión y restauración sostenibles de la tierra, y la mitigación y adaptación al cambio climático basadas en los ecosistemas.
Los actuales modelos de producción y consumo están llevando a los sistemas alimentarios a una trayectoria insostenible con múltiples repercusiones en el desarrollo humano. Trabajamos en Food and Agricultural Commodity Systems (en inglés, Sistemas de Productos Alimenticios y Agrícolas) para apoyar un nuevo paradigma de producción agrícola basado en sistemas agroecológicos diversificados y resilientes que funcionen simultáneamente para lograr resultados económicos, medioambientales, sociales y sanitarios.
El océano contribuye sustancialmente al desarrollo humano, incluyendo la seguridad alimentaria, el transporte, la energía, el turismo, los servicios críticos de los ecosistemas y alrededor de 3 billones de dólares al año a la economía mundial. Ayudamos a promover los acuerdos multilaterales regionales o mundiales existentes o previstos para hacer frente a las amenazas a la sostenibilidad del océano y apoyar la creación de un entorno político propicio para la restauración y protección del océano.
Nuestra iniciativa Ocean Promise (Promesa sobre el océano) es una visión de la economía azul que hace hincapié en la restauración de los casi 1 billón de dólares en pérdidas socioeconómicas anuales debidas a la mala gestión del océano. La promesa también consiste en ayudar a los países a aprovechar los sectores oceánicos nuevos y emergentes para aumentar las oportunidades socioeconómicas relacionadas con el océano.
Abordar la contaminación por plásticos es clave para proteger la salud humana y planetaria y salvaguardar el desarrollo sostenible. Trabajamos con países y comunidades de todo el mundo para eliminar la contaminación por plásticos a lo largo de toda la cadena de valor y transformar radicalmente la forma en que producimos, consumimos y eliminamos los plásticos.
Los pequeños Estados insulares en desarrollo (PEID) figuran entre los países más vulnerables a los efectos del cambio climático. Estas vulnerabilidades se ven agravadas por la degradación y el agotamiento del capital natural que sustenta los medios de vida y la economía. Nuestro apoyo a los PEID se centra en (i) la acción climática; (ii) la economía azul; y (iii) la transformación digital, con el acceso a la financiación como un facilitador clave, en línea con la Trayectoria de Samoa y la Agenda 2030.
El cambio climático, la degradación de los ecosistemas y la pérdida de biodiversidad afectan directamente a los pueblos indígenas y a las comunidades locales en los paisajes donde viven y trabajan. Aunque los actores locales son los más afectados por estos retos, también están muy motivados para hacerles frente. Sobre la base de más de 30 años de éxito en los programas de acción local, nuestra asistencia a los actores locales se basa en tres pilares fundamentales: (i) empoderamiento: fortalecimiento de la capacidad de acción de los actores locales a través de la acción colectiva para la promoción y la gobernanza inclusiva; (ii) resiliencia: apoyo a los actores locales para crear resiliencia socioecológica en sus paisajes a través de la asistencia técnica y la financiación; y (iii) inversión: transformación de los flujos de financiación para acelerar y sostener la acción local colectiva para el desarrollo sostenible a través de nuevas asociaciones y fuentes innovadoras de financiación.
La refrigeración (en inglés) es esencial para la salud humana, la seguridad alimentaria y la productividad económica, y cada vez es más importante debido al aumento de las temperaturas medias mundiales acompañado de olas de calor más extremas. Nuestra respuesta a los retos y oportunidades del sector de la refrigeración se centra en apoyar la transición a refrigerantes respetuosos con el clima y la formulación de planes de acción y programas nacionales de refrigeración, así como en promover soluciones energéticas integradas, junto con energías renovables en edificios e instalaciones de alto consumo energético, refrigeración urbana y soluciones sostenibles para la cadena de frío.
Trabajamos en todos los retos que plantean los recursos hídricos, abordándolos desde una perspectiva de gobernanza para promover el uso equitativo y eficiente, y la protección de los recursos hídricos, apoyando la creación de instituciones y el desarrollo de capacidades para la gobernanza participativa de los recursos hídricos y costeros.
En todo el mundo, más de dos mil millones de personas carecen de acceso a la recogida de residuos, lo que, unido a la cantidad cada vez mayor de desechos, constituye desde hace tiempo una preocupación pública por su impacto en la salud humana, el medio ambiente y el desarrollo socioeconómico. La iniciativa Desechos Cero (en inglés) surge ante la necesidad de pasar a una economía circular. Apoyamos la transición hacia el residuo cero centrándonos en los municipios para que adopten una planificación y programación integradas de la gestión de residuos. Ofrecemos apoyo político, consultivo y técnico, junto con la movilización de instrumentos financieros, la promoción de principios de producción y consumo sostenibles, y la educación y formación.
La iniciativa Digital for the Planet (Digital por el Planeta), basada en la Estrategia Digital 2.0 y en estrecha consonancia con la Digitalization Enabler Offer (Oferta Facilitadora de la Digitalización), catalizará, apoyará y ampliará las innovaciones digitales estratégicas que permitan soluciones más rápidas, sistémicas y transversales a las áreas temáticas integradas clave de la agricultura, los residuos cero, la urbanización, la energía, el cambio climático y la acción local, para permitir una transición verde, justa y digital de toda la sociedad.
Energía
Incrementar el acceso a la energía para aquellas personas que se encuentran en una situación rezagada, así como acelerar la transición hacia las energías renovables.
El consumo de energía en todo el mundo sigue aumentando, y el sector sigue siendo responsable de la mayor parte de las emisiones mundiales de CO2. Sin embargo, más de 700 millones de personas siguen sin tener acceso a la electricidad y más de 2.000 millones no disponen de una energía segura y fiable para cocinar. Una transición energética justa es fundamental para alcanzar tanto los ODS como las Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional en el marco del Acuerdo de París. Somos el mayor organismo de ejecución de las Naciones Unidas, apoyando a más de 100 países en su transición energética.
Igualdad de género
Hacer frente a los obstáculos estructurales para lograr la igualdad de género y reforzar el empoderamiento económico y el liderazgo de las mujeres.
Desde una posición única para orientar las políticas de igualdad de género basadas en pruebas, creamos y comunicamos nuevos datos y herramientas para cambiar las normas y estructuras sociales, desde el Gender Social Norms Index (Índice de Normas Sociales de Género) y el Africa Care Index (Índice de Cuidados de África), hasta el Public Mood Thermometer using Artificial Intelligence (Termómetro de Estado de Ánimo Público que con Inteligencia Artificial) para combatir el discurso de odio de género en línea.
Acercamos la ambición y la inversión para cerrar la brecha de género, trabajando para movilizar y alinear 1 billón de dólares de los Estados Unidos (USD) para la igualdad de género a través de la fiscalidad sensible al género y los flujos financieros públicos y privados.
Ayudamos a desmantelar las barreras estructurales que impiden el empoderamiento económico de las mujeres, generando empleos nuevos y resistentes para las mujeres, también como base para la recuperación económica a gran escala.
Ayudamos a transformar las dinámicas y estructuras de poder que generan y perpetúan la violencia de género, adoptando un enfoque social integrado para prevenir y responder a la violencia de género.
Contribuimos a ampliar los sistemas de cuidados como un derecho humano, una necesidad humana y una responsabilidad colectiva, al tiempo que se modifican las normas y reglamentos sociales para cambiar las responsabilidades y la relación entre el mundo de los cuidados remunerados y el de los no remunerados.
Ayudamos a los estados a prepararse para la igualdad de género, creando programas de capacitación institucional en todas las instituciones públicas, fomentando la participación y el liderazgo de las mujeres y llevando a los grupos de mujeres a las mesas de toma de decisiones.
Catalizadores
Optimizar EL IMPACTO DEL DESARROLLO
Digitalización
Apoyar a los países en la construcción de sociedades digitales inclusivas, éticas y sostenibles.
Trabajamos con los gobiernos para catalizar un enfoque para toda la sociedad, que reúna a la sociedad civil, el sector privado y otras partes interesadas, con el fin de abordar las oportunidades y los obstáculos para una transformación digital inclusiva.
Trabajamos con los países para crear infraestructuras públicas digitales sólidas e interoperables. La infraestructura pública digital (en inglés), un catalizador fundamental para los ODS, permite la prestación de servicios públicos vitales -desde transferencias de efectivo hasta distribución de vacunas- de forma inclusiva y a escala.
Trabajamos con los países para establecer los elementos fundamentales de un ecosistema de datos, incluido un marco nacional de gobernanza de datos (en inglés) que permita un uso eficaz y responsable de los mismos, la implantación de infraestructuras que permitan un intercambio seguro de datos y el uso de fuentes no tradicionales para políticas basadas en datos.
Damos apoyo a nuestros socios para que exploren tanto el potencial positivo como los riesgos de la inteligencia artificial para el desarrollo. Abogamos por una gobernanza segura, responsable e integradora. Como condición previa para el despliegue ético de la inteligencia artificial, adoptamos un enfoque centrado en las personas y basado en los derechos para la disponibilidad de datos, la calidad, la apertura y la rendición de cuentas.
Construimos y creamos confianza en el uso de las plataformas y servicios digitales entre las personas, los gobiernos y las empresas mediante el fortalecimiento de los principios de privacidad de datos (en inglés), la incorporación de garantías basadas en los derechos y la creación de capacidad para proteger la infraestructura y los sistemas.
Innovación estratégica
Capacitar a los gobiernos y las comunidades para mejorar el rendimiento de los sistemas en su conjunto, de modo que sean adaptativos y resilientes.
Financiación para el desarrollo
Asociarse con los gobiernos y el sector privado para armonizar los flujos de capital público y privado para los ODS y movilizar la financiación a escala.
Las finanzas públicas son fundamentales para el logro de los ODS. Apoyamos a los gobiernos en las diferentes etapas de la movilización y utilización de los recursos públicos. La oferta de servicios de Finanzas Públicas para los ODS facilita los vínculos entre los temas de políticas de desarrollo como el clima, el medio ambiente, el género, la salud, la pobreza y la gestión del riesgo de desastres y los presupuestos públicos. Nuestra oferta sobre financiación pública incluye: (1) elaboración de presupuestos; (2) deuda; (3) impuestos; y (4) instrumentos de financiación de riesgo soberano para los ODS.
Los ODS proporcionan el marco para tomar decisiones de inversión impulsadas por el impacto. Nuestra oferta de servicios contribuye a identificar oportunidades de inversión y modelos de negocio en los mercados emergentes, a dirigir el capital público y privado hacia la inversión en los ODS y a integrar los ODS en las operaciones y los objetivos empresariales.
Ayudamos a 86 países a desarrollar marcos nacionales de financiación integrados que muestren claramente cómo se financiarán los ODS a nivel nacional a través de fuentes públicas y privadas.
Tenemos como objetivo cambiar los sistemas actuales de toma de decisiones hacia la inversión con un impacto positivo en las personas y el planeta. Trabajamos en los marcos políticos y la rendición de cuentas para la medición y gestión del impacto de los ODS; los sistemas del sector público para el seguimiento de la financiación pública y privada hacia el impacto de los ODS; la medición y gestión del impacto de los ODS para las entidades del sector privado; y la garantía de impacto y las normas para los actores públicos y privados.
La SDG Finance Academy (Academia de Financiamiento para los ODS) garantiza el éxito de nuestras otras cuatro ofertas de servicios sobre finanzas sostenibles. La Academia sienta las bases para apoyar su prestación, alcance y aplicación mediante el desarrollo de las capacidades en todo nuestra organización y nuestros socios. La Academia ofrece formación y crea una comunidad de expertos para apoyar la implementación.