Tres avances que las ciudades necesitan con urgencia para lograr los ODS

8 de Febrero de 2023
Nairobi skyline at night

Las acciones de las ciudades son fundamentales para lograr los ODS, ya que los gobiernos locales desempeñan el papel responsable en primera instancia en la prestación de servicios, en el desarrollo económico y en las inversiones destinadas a infraestructura.

Foto: PNUD Kenya / Kevin Ouma

Desde 2019, las ciudades se han convertido en el epicentro de la respuesta y recuperación de la pandemia de COVID-19. El cambio climático ha intensificado las amenazas en las urbes y el aumento del costo de vida ha ejercido una presión adicional sobre las economías nacionales y locales a nivel mundial.

Estos impactos de las crisis vividas en las ciudades han aumentado el número de mujeres y hombres en zonas urbanas que viven en la pobreza, incluidos algunos jóvenes que han optado por continuar sus estudios y vida laboral en la economía informal.

A mitad del horizonte de tiempo para el 2030, nos encontramos más rezagados en el camino hacia los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de lo que estábamos en un comienzo. Los desafíos que tenemos por delante son enormes y necesitamos una ambición tenaz si queremos lograr los avances necesarios.

Este año, el Foro Político de Alto Nivel revisará el ODS 11 sobre ciudades y comunidades sostenibles. La Reunión del Grupo de Expertos, compuesto por especialistas de instituciones públicas y privadas, y organizado por el Ayuntamiento de Bilbao y el Gobierno de España, marca un hito importante del cual el PNUD se enorgullece de haber coorganizado con el Departamento de Asuntos Económicos y Sociales (UNDESA por sus siglas en inglés) y Programa de las Naciones Unidas para los Asentamientos Humanos (ONU-Hábitat).

La COVID-19 ha puesto de relieve que la acción a nivel municipal es fundamental, ya que son los gobiernos locales los que desempeñan un papel de primera línea en la prestación de servicios, en el desarrollo económico y en las inversiones en infraestructura. Las lecciones que aprendimos en la respuesta ante la pandemia, tras el trabajo práctico del PNUD con los planes de respuesta socioeconómicos de la ONU en 140 países, y la gran cantidad de datos y análisis obtenidos, han ayudado a aportar soluciones innovadoras para contextos urbanos trabajando con nuestros socios a través de tres vías transformadoras.
 

1. ABORDAR LAS DESIGUALDADES MÁS ARRAIGADAS CON UN CLARO ENFOQUE EN LA DESIGUALDAD DE GÉNERO
En 2022, Arup y el PNUD realizaron una encuesta mundial en 43 países para obtener un mejor entendimiento sobre cómo responden los espacios urbanos a las necesidades de las mujeres. Nuestro reporte en conjunto, "Diseñar ciudades adecuadas para las mujeres", confirma que más de la mitad de las mujeres se sienten inseguras en lugares públicos y al utilizar el transporte público. Los hallazgos envían un mensaje claro a los tomadores de decisiones: la forma en que se diseñan, construyen, gestionan y mantienen las ciudades afecta al aprendizaje, al trabajo, al ocio y a la participación política y cultural de las mujeres; así las ciudades podrían fomentar las redes comunitarias de apoyo para determinar hasta qué punto las mujeres se sienten seguras en su vida cotidiana, o no.

Nuestra alianza con la municipalidad de Bogotá en la aplicación del Sello de igualdad de género para integrar las cuestiones de género en todas las instituciones y políticas públicas, ha dado lugar al diseño de una herramienta de georreferenciación fácil y de bajo costo que mapea información en tiempo real sobre la oferta de asistencia y cuidados en una ciudad o zona. Dicha herramienta combina los enfoques más tradicionales del análisis urbano y de género con metodologías innovadoras para equilibrar la demanda y la oferta de servicios de cuidados disponibles, lo que ha contribuido a reducir las horas de cuidados no remunerados de las mujeres. Los esfuerzos para implantar la cartografía de los servicios asistenciales están en marcha en Montevideo (Uruguay) y, a su vez, existen planes para ampliarlos a otros países.
 

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Este año el Foro Político de Alto Nivel revisará el progreso del ODS 11 sobre ciudades y comunidades sostenibles.

 

2. ACCIÓN CLIMÁTICA A NIVEL LOCAL
La lucha contra el cambio climático empieza en las ciudades, ya que son éstas las principales consumidoras de energía y emisoras de gases de efecto invernadero (GEI), pero al mismo tiempo, son las urbes las que han liderado la fijación de objetivos ambiciosos y el impulso de soluciones innovadoras. Así, las ciudades que hagan un uso más eficiente de recursos -en transporte, calefacción y refrigeración- podrían lograr reducciones de hasta 50 % en el uso de energía, emisiones de GEI y otros recursos.

En el marco de nuestra iniciativa Climate Promise, de los más de 120 países a los que hemos ayudado a aumentar su ambición climática, en 55 de ellos, estamos colaborando con gobiernos y otras partes interesadas para integrar los compromisos y objetivos de las Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC por sus siglas en inglés) en los planes de desarrollo y/o presupuestos subnacionales de los gobiernos. Por ejemplo, la Argentina ha creado un grupo oficial dentro de su Gabinete Nacional de Cambio Climático para coordinarse con las provincias y los municipios. Por su parte, Sri Lanka está revisando sus políticas de planificación urbana para calibrar los riesgos climáticos y el potencial de mitigación.

Si la urbanización se gestiona bien, las ciudades podrían contribuir significativamente a cumplir los objetivos NDC y mantener así la ambición de 1,5 ºC, aumentando al mismo tiempo la resiliencia al cambio climático.


3. IMPULSAR EL FINANCIAMIENTO PÚBLICO Y PRIVADO A DISPOSICIÓN DE LAS CIUDADES
El acceso al financiamiento es una de las principales limitaciones a las que se enfrentan los gobiernos municipales y regionales en todo el mundo. Los confinamientos causados por la COVID-19 han repercutido directamente en las economías locales. Se estimó que las autoridades locales habrían recibido entre un 15 % y un 25 % menos ingresos en 2021, lo que pone en peligro las inversiones destinadas a la prestación de servicios y a los esfuerzos de desarrollo urbano sostenible.

En estrecha colaboración con UNDESA y 15 organismos de la ONU, el Fondo Monetario Internacional (FMI) y la Unión Europea (UE), estamos implementando los marcos de financiamiento nacional integrado (INFFs por sus siglas en inglés) en más de 70 países. El PNUD ha promovido los INFFs a través de varios niveles de gobernanza coordinados por las Comisiones Nacionales de Planificación. Los INFFs ofrecen a los ministerios un enfoque flexible para reforzar las prioridades de financiación dentro de las instituciones nacionales, a través de un marco de financiación más integrado y holístico. Por ejemplo, el INFF de Ghana está movilizando recursos para financiar Planes de Recuperación de la COVID-19 en cinco distritos en alianza con el PNUD.

Para lograr la escala de transformación requerida en nuestras ciudades, tenemos que abordar urgentemente la desigualdad, la crisis climática y la financiación mediante acciones contundentes. Juntos, tenemos que conseguir el apoyo para una mayor colaboración, para garantizar el espacio de los actores locales y las partes interesadas y para hacer todo lo posible para sostener la aplicación de los compromisos políticos asumidos a través de la Nueva Agenda Urbana, la Agenda 2030 y el Acuerdo de París.

 

Para lograr la escala de transformación requerida en nuestras ciudades, tenemos que abordar urgentemente la desigualdad, la crisis climática y la financiación mediante acciones contundentes.