Los conflictos sociales en América Latina
Los conflictos sociales en América Latina
5 de Diciembre de 2013
La presente investigación es el primer producto del Observatorio Regional de Conflictividad. Considera los conflictos ocurridos en la región entre octubre de 2009 y septiembre de 2010, en un contexto de relativa estabilidad en que América Latina salía paulatinamente, y en muchos casos de forma relativamente exitosa, del primer embate de la crisis económica mundial.
La conflictividad en América Latina comparte ciertos rasgos comunes ya que se desarrolla en un contexto caracterizado por la existencia de estructuras de poder muy concentradas y de una desigualdad crónica, que son fuertemente cuestionadas por la ciudadanía. Los conflictos son complejos y se presentan cada vez más fragmentados, en algunos casos son muy numerosos y alcanzan gran intensidad; pueden agruparse en tres grandes campos con racionalidades propias: reproducción social, institucional y cultural, aunque frecuentemente se sobreponen. La participación social en los conflictos es amplia, así como la capacidad de movilización ciudadana, mientras que las instituciones estatales –que son las principales demandadas– son débiles y no tienen la suficiente capacidad para gestionar los conflictos dentro de los marcos democráticos.
Aparecen nuevos espacios públicos vinculados con sistemas de comunicación en los que los conflictos se representan de manera contradictoria, desplazándose de manera creciente hacia las redes de información y comunicación con efectos multiplicadores en los nuevos escenarios de poder. Actualmente Latinoamérica vive un momento único de oportunidades sociopolíticas y económicas que permiten pronosticar escenarios mejores para avanzar en las metas de desarrollo democrático; sin embargo, si no se incrementa la capacidad política de procesamiento de los conflictos en los Estados y en las propias sociedades se desaprovecharán estas oportunidades para avanzar en la disminución de las brechas sociales y de las condiciones de inequidad que dan lugar al descontento y a la protesta.
Aspectos destacados
- Latinoamérica se confirma como una región con una conflictividad intensa.
- En términos generales, los países que registran el número más alto de conflictos son Bolivia, Perú y Argentina, con un total de conflictos superior a los 200
- Desde la perspectiva de las orientaciones políticas, los países con regímenes indigenistas neodesarrollistas y nacional-populares registran una cantidad mayor de conflictos. Este dato reflejaría la intensidad de los cambios que estas sociedades están atravesando.