·Costa Rica, país pionero en la reducción de la deforestación, recibirá una recompensa de 20 millones de dólares por parte de Noruega por la reducción de 2 millones de toneladas de CO2.
·El acuerdo sitúa al país en el camino para acceder a una mayor financiación de los mercados de carbono en el futuro a nivel mundial.
·PNUD apoyó en la asesoría técnica para la obtención de estos nuevos fondos y contribuirá en el proceso de verificación de resultados.
Costa Rica recibirá un pago de 20 millones de dólares por parte de Noruega, como compensación por reducir 2 millones de toneladas de CO2 en reconocimiento por los esfuerzos del pueblo de Costa Rica por proteger los bosques y luchar contra el cambio climático, lo que contribuye a su vez a activar el mercado de carbono forestal a nivel mundial.
El Presidente Carlos Alvarado junto con la ministra de Ambiente y Energía, Andrea Meza firmaron el jueves durante la Cumbre Climática COP26 que tiene lugar en Glasgow.
Dicha compensación se da a través de dos acuerdos, el primero, entre ambas naciones y otro dentro de la coalición LEAF.
El acuerdo bilateral comprende el reconocimiento de un millón de toneladas de CO2 para el período crediticio 2017 por un monto de 10 millones de dólares.
El otro pago, se dio dentro de la Coalición LEAF formada por algunas de las mayores empresas del mundo y los gobiernos de Noruega, Reino Unido y Estados Unidos. En este grupo, Noruega dio el primer paso al dar a Costa Rica 10 millones de dólares por la reducción de un millón de toneladas de CO2 para el período 2022-2026.
Costa Rica fue uno de los primeros países que respondió al llamado de la Coalición LEAF. Estos 10 millones de dólares son apenas un primer paso, dado que se pueden captar más compradores dentro de esta Coalición, que entró en marcha en abril pasado en la Cumbre del Clima, convocada por el presidente Biden, y que durante la COP26 ha anunciado que ha conseguido movilizar una cantidad inicial de 1.000 millones de dólares para pagar a los países con bosques tropicales que reduzcan la deforestación en el periodo 2022- 2026.
Noruega pretende canalizar los pagos a través de Emergent, una entidad sin ánimo de lucro que actúa como facilitador de la Coalición LEAF y que pretende facilitar las transacciones entre los países tropicales con bosques y el sector privado.
"Estamos seguros de que esto no solo es la continuación de una colaboración histórica entre ambos países, sino también el inicio de grandes avances en las finanzas climáticas que ambos países anhelamos. Costa Rica mantiene su compromiso de seguir avanzando en el camino de la descarbonización de nuestra economía y de continuar en la senda del crecimiento verde e inclusivo", destacó la ministra Andrea Meza, durante el anuncio.
Por su parte el ministro de Clima y Medio Ambiente Barth Eide, expresó que "Estamos dispuestos a apoyar a Costa Rica para que acceda a más financiación climática, incluso del sector privado. Garantizar el pago a Costa Rica tendrá un doble efecto. No sólo recompensará al país por los resultados actuales, sino que los pagos se destinarán a esfuerzos que puedan desencadenar resultados aún mejores”.
Nuevo estándar de carbono
Costa Rica busca ser pionera en mercados internacionales de carbono forestal y mantener altos estándares de integridad ambiental en línea con los Principios de San José.
El desempeño de Costa Rica será verificado por una tercera parte utilizando el estándar Architecture for REDD+ Transactions (ART). Costa Rica fue uno de los primeros países en presentar una nota conceptual para el nuevo estándar y está buscando ser el primer país verificado con dicho estándar a principios de 2022.
Noruega garantiza un precio mínimo de 10 dólares por tonelada reducida de CO2 certificadas a través de ART. Esta transacción ayudará a Costa Rica a realizar la transición hacia el nuevo estándar ART y a cubrir la brecha de financiación antes de que las reducciones de emisiones puedan ser pagadas bajo la Coalición LEAF.
“Colaboramos desde el PNUD con apoyo técnico y financiero para la validación, verificación y registro de las reducciones de emisiones bajo el estándar ART-Trees, para que Costa Rica siga conservando sus bosques y a su vez contribuya con la mejora de calidad de vida de las poblaciones en condición de vulnerabilidad. Este trabajo lo realizamos en conjunto con la Secretaría REDD+ que integran el Fondo de Financiamiento Forestal (Fonafifo) y el Sistema Nacional de Áreas de Conservación (SINAC) en el marco de Minae”, resaltó José Vicente Troya, Representante Residente del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
Experiencias exitosas que suman a este camino
Costa Rica ha tenido experiencias exitosas recientes también con una reciente verificación de los programas de Pagos de Servicios Ambientales (PSA) y de control y prevención de incendios forestales , la cual fue realizada por una firma auditora internacional reconocida, contratada por PNUD en el marco del Proyecto REDD+ Pago Basado en Resultados, financiado por el Green Climate Fund (GCF).
El PSA representa el mayor programa de transferencia de recursos a comunidades rurales y a pueblos indígenas, que desde hace más de 20 años ha sido financiado principalmente por el impuesto sobre los combustibles y el canon de aprovechamiento del agua, pero dada la crisis fiscal y la recesión económica causada por la pandemia, se hace necesario la búsqueda de nuevas opciones de financiamiento climático que apoyen los esfuerzos nacionales hacia la descarbonización.