Según datos del Directorio de Empresas y Establecimientos (DIEE) 2019, del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), en Ecuador, las microempresas representan el 91% del sector productivo nacional, caracterizándolas como unidades de producción con ventas de hasta 100.000 dólares, que cuentan con una nómina de entre 1 y 9 empleados. Esto implica que de las 883.000 empresas que se registraron en 2019 aproximadamente 803.000 son microempresas.
Las micro y pequeñas empresas son la forma predominante de organización en todas las actividades económicas; aunque no son las unidades que generan la mayor cantidad de ingresos, emplean alrededor de un 40% de la fuerza laboral registrada.
Los datos indican también que la cantidad de empresas existentes en el país es muy sensible a la tasa de crecimiento económico. De hecho, las empresas nacen o desaparecen a una tasa mayor que las variaciones de crecimiento o decrecimiento económico, por lo que se esperaría que, en 2020, por efecto de la reducción económica causada por la pandemia, el número de empresas que habría desaparecido superaría el 7,8% que se observó para la economía en general.
Durante la pandemia por el COVID-19, el segmento de micro y pequeñas empresas ha sufrido un impacto considerable, registrándose cierres de entre 70 y 90% de las empresas en algunos sectores, según la Evaluación Socioeconómica PDNA Covid-19 (Gobierno de Ecuador). La crisis añadió varios retos adicionales para el sector, entre ellos la reducción de la brecha digital.
En este contexto, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en Ecuador ha realizado esfuerzos junto a contrapartes nacionales, socios y aliados, para promover el fortalecimiento de capacidades en el sector productivo nacional, con especial énfasis en las micro y pequeñas empresas, a través de diferentes metodologías. El objetivo es mejorar la inserción en cadenas productivas o círculos comerciales, mediante un proceso de fortalecimiento de la gestión y mejora de alianzas. Esto se logra con las metodologías Creciendo Con Su Negocios e Iniciando Con Su Negocio.
De esta manera, entre 2018 y 2020 se logró apoyar a 45 asociaciones de productores ubicados en las zonas rurales de la Costa y Amazonía.
También, como impulso a la transformación digital de los micro y pequeños comercios se diseñó y compartió la metodología #EnMarchaDigital, que consiste en un paquete de videos, guías y herramientas desarrollados en el contexto de la pandemia, y que han llegado de manera directa a 580 micronegocios y de manera indirecta a 120.000 unidades de todo el país.
Durante el presente año, el PNUD continuará implementando estos procesos. #EnMarchaDigital sigue aportando a la reactivación de los negocios en colaboración con gobiernos locales en las ciudades de Guayaquil y Ambato y en las provincias de Pichincha, Loja y Galápagos. En total, cerca de 800 negocios fueron y son partícipes activos de una asesoría personalizada, enfocada en herramientas prácticas y ágiles para mejorar sus capacidades de manejo de clientes, incorporación de herramientas digitales para hacer negocios, análisis financiero básico para la sostenibilidad de sus actividades, prácticas ambientales y de bioseguridad, e igualdad de género.
Otros ejemplos son la colaboración con la Agencia de Desarrollo Económico – ConQuito, con la que estamos trabajando junto a 5 asociaciones de productores de café, cacao, caña de azúcar y sábila, ubicados en las parroquias rurales del Distrito Metropolitano de Quito, a través de la metodología Creciendo Con Su Negocio; y la asistencia técnica a bio emprendimientos en el marco del programa PROAmazonía, con la capacitación de técnicos de los Ministerios del Ambiente, Agua y Transición Ecológica; y de Agricultura y Ganadería, y de diez gobiernos locales amazónicos, con la metodología Iniciando Con Su Negocio.
Esto se realiza con la visión de que la asistencia técnica debe estar acompañada de transferencia de conocimientos que brinde sostenibilidad a los procesos.
Otro eje fundamental es la economía popular y solidaria en el sector productivo, y en alianza con la Corporación Nacional de Finanzas Populares y Solidarias (CONAFIPS) estamos trabajando en procesos de asistencia técnica a las cooperativas de ahorro y crédito para la definición de estándares de colocación de crédito verde e inclusivo. Esto con el objetivo de promocionar una recuperación económica más sostenible.
Por último, y para facilitar el emprendimiento, estamos avanzando junto al Ministerio de Producción, Comercio Exterior, Inversiones y Pesca, en el desarrollo de un repositorio de servicios no financieros dirigido a emprendedores, que facilite el acceso a capacitación, información y servicios provistos desde los gobiernos central y locales.
Todos estos esfuerzos, articulados con los diferentes niveles del Estado, buscan aportar a la reactivación económica del país promoviendo un modelo productivo inclusivo y sostenible, en donde nadie se quede atrás.
Cristina Burgos, oficial de Desarrollo Económico Inclusivo del PNUD en Ecuador