La cuenca del río Coca cuenta con voluntarios y voluntarias que contribuyen con su trabajo al monitoreo de eventos hidrometeorológicos

15 de Julio de 2024
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Baeza, 10 de julio de 2024.- En junio de 2024, se desarrolló el taller “Red de Observadores del Clima para la cuenca hidrográfica del río Coca”. Este espacio permitió fortalecer la red de voluntarios y voluntarias que se conformaron como Observadores del Clima para la cuenca del río Coca, actualmente esta red cuenta con 16 miembros.  

Las y los voluntarios viven en las provincias de Orellana, Napo y Sucumbíos. Su trabajo consiste en medir diariamente la cantidad de lluvia que cae y reportarla mediante la app Volunclima

En este taller se desarrollaron temáticas como: fundamentos del monitoreo climático; uso del pluviómetro y aplicativo Volunclima; interpretación de reportes generados por el Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología-INAMHI; entre otros.

Para Verónica López, analista de Monitoreo de Eventos Adversos de la Coordinación Zonal 2 de la Secretaria Nacional de Gestión de Riesgos (SNGR), “Es importante contar con una red de observadores en la cuenca del río Coca para que puedan aportar con información confiable desde el territorio hacia el sistema de alerta temprana, la información que proporcionen los observadores permitirá brindar insumos para mejorar la toma de decisiones y, de esta forma, reducir el impacto en la población y sus bienes cuando ocurra un evento adverso”. 

La capacitación se organizó de manera conjunta entre el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo – PNUD y la SNGR, también se contó con el apoyo del Centro Internacional para la Investigación del Fenómeno de El Niño – CIIFEN y el INAMHI. 

La erosión regresiva en el río Coca pone en constante alerta a la población asentada en la ribera, por lo que es de vital importancia levantar información y análisis para comprender mejor el proceso erosivo. A decir del especialista en Desarrollo Informático del CIIFEN, Pier Maquilón, esta red de Observadores del Clima “colabora con el levantamiento de información y el reporte de precipitaciones y eventos hidrometeorológicos, esto permite identificar umbrales que alertan sobre la ocurrencia de eventos extremos para la toma de decisiones oportunas”.

El taller tuvo una duración de 12 horas. Se fortalecieron los conocimientos y habilidades de los y las participantes, y se logró empoderar a las y los voluntarios sobre el importante rol que desempeñan al recoger la información pluviométrica. Iscra Parra, voluntaria de la red de observadores de la parroquia Borja (cantón Quijos, Napo), destacó: “El impacto que genera el trabajo en la red de observadores en la comunidad es muy positivo y alentador, porque nos permite mejorar el monitoreo en lugares donde no existen estaciones hidrometeorológicas; además, fortalece nuestra resiliencia ante situaciones adversas provocadas por el cambio climático”. 

El trabajo de la red de observadores del clima complementa al sistema de alerta temprana comunitario (SATC) para la cuenca del río Coca, lo cual articulará acciones en coordinación con los Gobiernos Autónomos Descentralizados (GAD) parroquiales y municipales cuyos territorios se encuentran dentro de la cuenca en las provincias de Orellana, Napo y Sucumbíos.

Sobre el proyecto

El proyecto “Acciones anticipadas para apoyar la respuesta a nivel comunitario y local frente a la erosión regresiva de la cuenca del río Coca y otras amenazas - HIP Erosión El Coca” es cofinanciado por la Oficina de Ayuda Humanitaria y Protección Civil de la Comisión Europea (ECHO) y ejecutado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), en coordinación con la Secretaría de Gestión de Riesgos, ADRA, Fundación Centro Lianas y los Gobiernos Municipales de Francisco de Orellana, Joya de los Sachas y El Chaco. 

Se han beneficiado 61.433 personas, de 14 comunidades localizadas en las riberas del río Coca que están expuestas diariamente a los efectos de la erosión regresiva.