La inclusión de las personas jóvenes en los procesos de desarrollo es esencial para lograr un progreso equitativo y sostenible. A pesar de los avances en desarrollo humano en las últimas décadas, las desigualdades entre las distintas regiones y los diferentes grupos socioeconómicos siguen siendo una barrera significativa en muchas partes del mundo. En América Latina y el Caribe, donde las juventudes representan más del 25% de la población, resulta crucial invertir en su inclusión para superar estas desigualdades.

En línea con este objetivo y en alianza con el Organismo Internacional de Juventud para Iberoamérica (OIJ) y el CAF – banco de desarrollo de América Latina y el Caribe, el PNUD ha desarrollado la Serie Desafíos, que identifica retos y genera recomendaciones a través de evidencia en las áreas de gobernabilidad, inclusión y medioambiente para fortalecer la institucionalidad en temas de juventud en Iberoamérica.

El primer cuadernillo aborda los desafíos en la gobernabilidad, identificando que, a pesar de que las personas jovenes en la región tienden a tener niveles educativos más altos y un mayor acceso a tecnologías que sus predecesores, enfrentan una crisis de confianza en las instituciones públicas. Cerca del 40% de las y los jóvenes entre 15 y 25 años, no confían en sus gobiernos, lo que refleja una desilusión creciente hacia las estructuras de poder actuales. Según los datos disponibles, el 75,7% percibe que sus países están gobernados por grupos poderosos en función de intereses particulares, mientras que solo el 24,3% considera que se gobierna en beneficio de toda la población. La violencia también es un desafío crítico, con la región registrando un alarmante 34% del total de muertes violentas a nivel mundial, a pesar de albergar solo al 9% de la población global.

El segundo cuadernillo se sumerge en cómo esa falta de confianza se traduce en obstáculos reales para la participación significativa de las personas jovenes mostrando que, a pesar de la existencia de marcos normativos como la Convención Iberoamericana de Derechos de los Jóvenes, que reconoce a la juventud como un actor estratégico en el desarrollo, la realidad muestra que su participación sigue siendo limitada. Solo un 3,04% de parlamentarios en la región tiene menos de 30 años, reflejo de la escasa representación juvenil en los órganos de poder. Se propone que para mejorar la inclusión, es necesario no solo aumentar la representación juvenil en las estructuras políticas tradicionales, sino crear y fortalecer espacios alternativos de participación, especialmente en el entorno digital, donde las juventudes ya están liderando movimientos sociales y ambientales.

El tercer cuadernillo nos lleva a explorar otra área crítica: el medioambiente. Aquí, la voz de las juventudes no solo es necesaria; es esencial para enfrentar desafíos que van desde la deforestación hasta el cambio climático. Las personas jóvenes, especialmente las mujeres, están en la primera línea de estas luchas, enfrentando vulnerabilidades específicas pero también liderando el cambio. Las mujeres jóvenes son particularmente vulnerables a las crisis ambientales, con un impacto desproporcionado de la violencia de género en contextos de degradación ambiental. Fomentar el liderazgo juvenil en la gestión de recursos naturales y en la implementación de soluciones innovadoras para enfrentar los desafíos ambientales de la región son acciones claves que nos dirigen a un futuro más sostenible, visibilizando el vinculo entre las agendas de juventud y medioambiente. 

De esta manera, esta serie sigue  un hilo conductor: el de la necesidad de una mayor inclusión y participación juvenil en todas las esferas. Desde la gobernabilidad hasta la justicia ambiental, las personas jóvenes tienen el potencial de transformar sus comunidades y, por ende, el mundo. Sin embargo, para que esto sea posible, es crucial que se escuchen sus voces y se les otorgue el poder necesario para actuar.

¿Cómo promovemos la participación significativa e inclusiva de las juventudes? Como parte del G20 Social y eje fundamental de los foros de diálogo con la sociedad civil, el Youth 20 (Y20) es el Grupo Oficial de Compromiso de las Juventudes del G20, que reconoce el papel fundamental que juegan  en la formulación de políticas públicas y la transformación social. El Y20 le brinda a jóvenes líderes de todo el mundo, la oportunidad de participar como protagonistas en los procesos de reflexión sobre temas globales, compartir experiencias y conocimientos, argumentar, negociar y construir propuestas, soluciones y consensos para las discusiones y decisiones del G20.

En el marco de la semana del día internacional de la juventud 2024, el PNUD se hizo presente en el Y20 con las recomendaciones de la Serie Desafíos, por medio de un conversatorio enfocado en fortalecer el rol de las personas jóvenes en el desarrollo sostenible. 

Los cuadernillos no solo ofrecen un diagnóstico claro de los retos que enfrentamos, sino también una hoja de ruta que nos invita a conectar la capacidad de innovar de las juventudes con los procesos de toma de decisiones, siendo un elemento clave para enfrentar los desafíos del desarrollo sostenible. Una democracia efectiva presupone la inclusión de las juventudes en la generación de un futuro inclusivo y sostenible para todas las personas, sin dejar a nadie atrás.