México cuenta con uno de los contextos migratorios más complejos del mundo, caracterizado por altos niveles de emigración y una presencia cada vez mayor de personas retornadas, deportadas forzosamente, en tránsito, inmigrantes, solicitantes de asilo, refugiadas y desplazadas internas.

No obstante, a pesar de la creciente relevancia de estos flujos, no existe aún una política articulada para integrar plenamente en la vida cotidiana del país a las personas que arriban.

En dicho marco, en este documento se presenta una revisión de la historia reciente de la migración en el país, con especial énfasis en las respuestas políticas que se han desarrollado en los últimos años.

Para realizar dicha revisión se llevó a cabo un exhaustivo análisis de datos primarios y secundarios disponibles, que incluyen los marcos legales y de política pública federal y locales, diversos estudios y análisis relevantes elaborados por el sector académico y civil, y la opinión pública sobre la materia.

En el texto se plantea que, a pesar de que en el país existe un contexto que podría considerarse como favorable hacia la migración, la falta de una política migratoria y de integración articulada y coherente genera condiciones que favorecen la exclusión de quienes se asientan en el país o transitan por él, lo que pone en riesgo la cohesión social e incrementa las vulnerabilidades de la población en situación de movilidad. El trabajo concluye con una serie de recomendaciones sobre la materia.