22 de abril del 2019
Este día es un llamado a la concientización y acción ante la problemática ambiental.
Hoy en el Día Internacional de la Madre Tierra, recordamos que los ecosistemas son vitales para los seres humanos, ya que nos brindan los alimentos que consumimos, el agua que bebemos, la madera y los combustibles que utilizamos; regulan el clima, aire, suelo, agua y la polinización de nuestros cultivos, además de ser espacios culturales donde podemos recrearnos y conectarnos con el medio ambiente. Nos proveen los materiales esenciales para vivir, seguridad y salud, por lo cual es de suma importancia su cuidado y protección.
Este día representa un llamado a la concientización y acción ante la problemática ambiental, el daño a los ecosistemas, y al bienestar del ser humano.
En Guatemala, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) establece líneas de trabajo para el Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible que se concentran en: gobernabilidad ambiental, mitigación y adaptación al Cambio Climático, conservación y uso sostenible de la biodiversidad, aprovechamiento de los bienes y servicios ambientales, planificación territorial y energía renovable para todos. A través de sus programas e iniciativas, el PNUD trabaja de manera conjunta con socios estratégicos en acciones como, el apoyo al Plan de Acción Nacional de Lucha contra la Degradación de la Tierra, la Desertificación y la Sequía, el desarrollo de normativas para la instrumentalización de la Ley de Cambio Climático (MARN), la facilitación a las acciones de la Ley PROBOSQUE. Además, se ha trabajado con el INAB propiciar incentivos forestales que permiten ejecutar proyectos de reforestación, manejo, protección y conservación del bosque. Por otro lado, se ha fortalecido la planificación municipal, al apoyar a los gobiernos locales en el diseño de sus Planes de Desarrollo Municipal en más de 30 municipios de Sololá, Suchitepéquez, Huehuetenango, Jalapa, Jutiapa y Santa Rosa.
Se deben realizar acciones locales, promover la participación de las comunidades, la apropiación de buenas prácticas, y la adopción de principios de manejo sostenible de la tierra y del bosque en los sistemas productivos. Para esto, al sector productivo y los tomadores de decisiones sobre los recursos y la tierra, deben conocer la relación de los bosques en la recarga y reserva del agua, protección de laderas y refugio de especies (plantas y animales), la importancia de la existencia de biodiversidad y la necesidad de desarrollar procesos de producción sostenible y acciones de conservación tomando en cuenta las características económicas, políticas y sociales de los territorios.
Escrito por:
Flor de María Bolaños, Oficial de Programa Energía y Medio Ambiente