Apoyar a los pequeños Estados insulares en desarrollo y países menos adelantados para hacer frente al desafío climático

8 de Noviembre de 2021

El cambio climático amenaza con deshacer décadas de progreso en el desarrollo en los Pequeños Estados Insulares en Desarrollo y los países menos adelantados. Sin embargo, sus gobiernos y su gente se mantienen firmes.

PNUD Sudán del Sur

Considera lo siguiente: los pequeños estados Insulares en desarrollo (PEID) y los países menos adelantados (PMA) representan menos del 1 % y entre el 3 y 6 % de las emisiones globales de gases de efecto invernadero, respectivamente. Sin embargo, enfrentan pérdidas anuales mucho más altas (como el porcentaje del PIB) debido a los efectos, en comparación con el promedio mundial.

Si bien el cambio climático es un problema mundial que nos afecta a todas las personas, sigue siendo una injusticia dolorosa que los países que menos han contribuido a esta crisis sean los más vulnerables a sus impactos. Y se enfrentan a los impactos más graves.

En algunos aspectos, este es un resultado cruel de la geografía, pero en la mayoría de los casos, también se debe a grandes desafíos socioeconómicos: la falta de diversificación económica, protecciones sociales inadecuada, una deuda pesada y la dependencia de los combustibles fósiles importados. Estos factores, junto con el hecho de que su crecimiento económico depende en gran medida de los sectores sensibles al clima, significa que están extremadamente expuestos a las presiones y los impactos climáticos.

Como persona nativa del Caribe, recuerdo haber vivido estos devastadores impactos de primera mano cuando los huracanes Iván y Emily azotaron Granada en 2004 y 2005. No solo nos quedamos luchando por encontrar refugio y otras necesidades básicas, sino que también tuvimos que lidiar con la difícil tarea de reconstruir sin una fuente obvia de asistencia a la vista. Solo el huracán Iván causó daños por más de USD 900 millones, que es más del doble del PIB de Granada.

Sin embargo, esta no es la historia principal. Si bien los PEID y los PMA están en la primera línea de la crisis climática, también están a la vanguardia de la acción climática.

Muchos han logrado avances importantes hacia el logro de los objetivos del Acuerdo de París, incluidos compromisos audaces en sus Contribuciones Determinadas a nivel Nacional (NDC, por sus siglas en inglés) actualizadas. De hecho, este año el 93 % de ellos tiene planes para mejorar sus NDC (frente al 42 % en 2019).

Estos países están desarrollando programas y estrategias integradas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y establecerse en una trayectoria de desarrollo con bajas emisiones de carbono y más resiliente. Están alzando sus voces en el escenario mundial.


EMPODERAR A LAS VOCES UNIDAS
Desde la mejora de la ambición climática (bajo nuestra Promesa Climática mundial) hasta la creación de resiliencia y la movilización de financiación climática, el PNUD está apoyando a los gobiernos de los PEID Y PMA en sus esfuerzos por responder a la crisis climática.

Entre los cientos de iniciativas que ejecutamos a nivel mundial se encuentra el proyecto Progressive Platforms (plataformas para el progreso). Respaldado por la Unión Europea e implementado a través de organizaciones y grupos internacionales, incluido el Grupo de países menos adelantados, la Alianza de los Pequeños Estados Insulares, el Instituto Global para el Crecimiento Verde, el Instituto Internacional para el Medio Ambiente y el Desarrollo y la Coalición de Alta Ambición a través de Independent Diplomat, el proyecto apoya los 84 PEID y los PMA para hacer la transición a economías resilientes con bajas emisiones de carbono.

Es importante destacar que uno de sus principales propósitos es equipar a los países vulnerables para que participen de manera más efectiva en las reuniones de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) y otros procesos relacionados.

Basándose en las capacidades y las experiencias locales, el proyecto se centra en ofrecer asesoramiento diplomático y legal y apoyo técnico práctico, así como en mejorar la capacidad de los funcionarios técnicos y para participar en negociaciones de alto nivel.

Este apoyo ha cambiado las reglas del juego, ya que garantiza que los PEID y los PMA sigan teniendo un lugar en la mesa donde se toman decisiones cruciales sobre el clima mundial.


INFLUIR EN EL CAMBIO
Desde su inicio en 2019, la iniciativa ha trabajado directamente con los socios del proyecto para brindar capacitación y apoyo para las negociaciones y otros compromisos clave relacionados con el clima y el medio ambiente.

Hemos visto resultados sólidos y tangibles, en particular un aumento en el número de miembros de los PEID y PMA que participan en reuniones internacionales.

También hemos visto un impacto a nivel nacional, con individuos que participan y utilizan sus habilidades de promoción para lograr cambios en su país de origen. Tomemos, por ejemplo, los diálogos de alto nivel, como el Placencia Ambition Forum, organizado por la Alianza de Pequeños Estados Insulares. Para estos diálogos, los negociadores juegan un papel clave en informar a los ministros sobre los acuerdos climáticos. A su vez, esto influye en las políticas a nivel nacional al implementar los resultados acordados del foro. Por lo tanto, vemos que una mayor participación influye directamente en la formulación de políticas sobre el terreno a través de una mayor voluntad política.

En Etiopía, el Instituto Global para el Crecimiento Verde apoyó al gobierno en la revisión de su estrategia de economía ecológica y resiliente al clima y en el trabajo de seguimiento de su proceso de mejora de las NDC. La nueva NDC de Etiopía se basó en esta estrategia, consolidando la importancia del trabajo realizado por estas plataformas.

En Senegal y Côte d’Ivoire, las organizaciones de la sociedad civil han recibido formación sobre diplomacia climática, lo que les ha permitido participar de forma eficaz en las numerosas reuniones donde se plantea el futuro de su población.

En el Pacífico, Independent Diplomat está brindando apoyo práctico al organizador de la Coalición de Alta Ambición, actualmente el presidente de las Islas Marshall. Este trabajo ha arrojado varios resultados importantes para el grupo: en noviembre de 2020, la Coalición publicó una declaración sobre Recuperación Resiliente, pidiendo que "el mayor porcentaje posible del gasto de recuperación fiscal se dedique a la economía verde y la profesión baja en carbono". La declaración instó a los países a asumir compromisos audaces con respecto a la recuperación de la COVID-19 y al clima, así como recibió más de 20 firmas a finales del 2020.

Podemos ver algunos de estos compromisos reflejados en las promesas de los países. Por ejemplo, en Antigua y Barbuda: el actual presidente de la Alianza de los Pequeños Estados Insulares presentó recientemente una NDC revisada con compromisos audaces para una transición justa de su fuerza laboral e iniciativas ecológicas que les ayudará a reducir su dependencia de los combustibles fósiles en más del 50 % para 2030.

Con el apoyo del proyecto, los socios han organizado colectivamente más de 50 seminarios web, talleres y sesiones de capacitación. Más del 90 % de los tecnócratas y diplomáticos de los 90 países han participado. Como resultado, los países pudieron agregar nuevos negociadores capacitando a sus equipos y se intercambió información clave sobre las negociaciones.


CAMPEONES CLIMÁTICOS INQUEBRANTABLES
Los PEID y los PMA están experimentando de manera cercana y urgente las consecuencias del calentamiento del planeta.

Sin embargo, aunque son extremadamente vulnerables, como de hecho todos lo somos, estos países no son pasivos. A menudo lideran el mundo en ambición, acción y promoción. Continúan demostrando su compromiso siendo campeones inquebrantables de la aspiración y pidiendo abiertamente a los países desarrollados que amplíen sus compromisos.

A través de programas de asociación como las Progressive Platforms (en inglés), nos aseguraremos de que estos países vulnerables sigan participando en las discusiones sobre el clima al más alto nivel.

En el PNUD estamos aquí para apoyarlos, para que puedan seguir siendo escuchados.

Sigue siendo una injusticia conmovedora que los países que menos han contribuido a la crisis sean los más vulnerables a sus efectos.