Según datos del Instituto de Acueductos y Alcantarillados (AyA) del 2019, en Costa Rica el 97,8% de la población recibe agua intradomiciliar, un número que coloca a nuestro país en una posición privilegiada a nivel latinoamericano y mundial en cuanto a acceso a agua potable. Sin embargo, pese a los grandes esfuerzos y avances en materia de saneamiento en los últimos años, solo un 14% de las aguas de alcantarillado sanitario recibe tratamiento. Este es, sin duda, uno de nuestros mayores retos ambientales.

El Programa de las Naciones Unidas (PNUD), a través del Proyecto Paisajes Productivos, innova con la instalación de dos baños secos ecológicos. Es un método alternativo de saneamiento, colocados en espacios estratégicos desde el punto de vista ambiental y social.

El primero de ellos se instaló en la parte alta del Corredor Biológico Interurbano María Aguilar (CBIMA), en La Unión de Cartago en la finca El Pizote. Es una propiedad pública bajo administración del AyA, donde se encuentra un tanque de almacenamiento y un pozo que abastece a parte de la población de la Gran Área Metropolitana (GAM), además de ser un sitio importante de recarga acuífera.

El segundo baño seco se construyó en la parte baja del CBIMA, en Alajuelita, en el sitio donde – también con el apoyo de Paisajes Productivos – se construye el vivero municipal de este cantón.

Además del aporte al entorno natural del CBIMA, ambas inversiones constituyen sitios demostrativos de educación y sensibilización ambiental. En estos puntos, instituciones, organizaciones y personas potencialmente interesadas en replicar la experiencia, pueden aprender sobre el funcionamiento y las ventajas de la tecnología.

El PNUD determinó que en época seca el río Ocloro presentaba 1.600.000 NMP/100ml coliformes fecales, lo saludable para los ríos urbanos son menos de 1000 coliformes fecales.

¿Qué es un baño seco ecológico?

Los baños o sanitarios secos ecológicos son una tecnología para la disposición y tratamiento de excretas humanas, que no requiere el uso de agua (salvo para el lavado de manos con posterior a su uso), sino que utiliza técnicas de compostaje para la gestión y tratamiento de las heces.

La construcción y uso correcto del sistema es importante para su adecuado funcionamiento, al igual que lo es en cualquier baño con tanque séptico o alcantarillado convencional. Debe contar con sistema de separación de residuos líquidos y sólidos, total aislamiento de las excretas, uso de material secante (aserrín, compost, ceniza), al menos dos cámaras separada para la maduración del compost y ventilación adecuada.

Es indispensable el uso de papel higiénico sin blanqueador ni perfumes y de desinfectante biodegradable, para que no afecte a las bacterias necesarias para la transformación de los desechos en compost. Se recomienda la aplicación de microorganismos de montaña para optimizar el proceso.

La higiene y el orden que se requieren son similares a los necesarios para cualquier baño convencional. Realizado de forma correcta, no existen malos olores.

Un mantenimiento adecuado consiste en, periódicamente y cuando sea necesario, aplanar el sustrato que se va acumulando en la cámara y luego tapar bien de nuevo una vez aplanado, con el fin de que el proceso de compost de las heces se realice adecuadamente. Para esto se debe utilizar un palo exclusivo para esta labor, lo suficientemente largo y con una T en su extremo inferior.

Cada 19 de noviembre se celebra el Día Mundial del Saneamiento (World Toilet Day) para crear conciencia sobre las 4.200 millones de personas que carecen de servicios de saneamiento gestionados de forma segura y el Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) 6: garantizar la disponibilidad de agua y saneamiento.

Aliados en la protección y uso racional del recurso hídrico

Los baños secos ecológicos no utilizan ni contaminan fuentes de agua. Son una solución ideal para sitios calificados como áreas ambientalmente frágiles; cercanos a cuerpos de agua o a la costa; aislados; de difícil acceso o con poco o nulo recurso hídrico disponible; debido a que no requieren la instalación de tanques sépticos o estar conectados a un sistema de alcantarillado sanitario o planta de tratamiento.

Anualmente, un baño seco ecológico utilizado por cuatro personas puede generar un ahorro de hasta 30.000 litros de agua, lo que significa que los dos baños instalados en el CBIMA permitirán economizar hasta 60.000 litros de agua al año.

Su costo es comparativamente menor al de construir un baño convencional y es un sistema circular, ya que el compost generado a partir de las excretas humanas puede ser utilizado como material secante en el mismo baño o para abonar y enriquecer el suelo cercano.

Entre sus desventajas, requiere de un espacio importante de construcción, por lo que es recomendable para sitios amplios.

Próximamente, PNUD pondrá a disposición del público un Manual de uso y mantenimiento de baños secos ecológicos, con el objetivo de que la experiencia pueda ser replicada en Áreas Silvestres Protegidas, terrenos administrados por AyA u otros operadores del servicio de agua y saneamiento, fincas privadas en áreas de recarga acuífera, entre otros.