El desarrollo sostenible del sector pesquero es vital para lograr la seguridad y diversidad alimentaria, aliviar la pobreza y aumentar el crecimiento económico. Las mujeres tienen un papel indispensable en este sector, no solo porque representan el 50% de la fuerza laboral, sino porque además están presentes en toda la cadena de valor. Sin embargo, sus contribuciones no han sido lo suficientemente valoradas y visibilizadas.

En Valparaíso, Chile, se llevó a cabo el Primer Encuentro Iberoamericano de Pescadoras Artesanales y Actividades Conexas, que reunió a mujeres fileteadoras, buzas, mariscadoras, recolectoras, estibadoras, pescadoras artesanales, administradoras, comerciantes y dirigentes de Perú, Nicaragua, Colombia, Ecuador, Brasil, México, España, Rapa Nui y Chile, quienes compartieron sus experiencias, logros y desafíos que enfrentan en el sector.

El encuentro se realiza en el marco de Humboldt II, iniciativa que ejecuta la Subsecretaría de Pesca y Acuicultura (SUBPESCA) y el Viceministerio de Pesca y Acuicultura del Perú (VMPA-PRODUCE) e implementa el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), con cofinanciamiento del Fondo para el Medio Ambiente Mundial (GEF, por su siglas en inglés), para promover la gestión y conservación de los recursos marinos del Gran Ecosistema de la Corriente del Humboldt, poniendo un especial énfasis en la promoción, desarrollo y reconocimiento de las mujeres pescadoras y vinculadas a actividades conexas. 

“Aunque las mujeres tienen un rol indispensable para que la producción pueda funcionar, sus actividades suelen tener una menor valoración simbólica que es reflejo de las desigualdades que existen. Por eso es tan importante que puedan compartir sus experiencias, fortalecer sus organizaciones e ir aclarando las agendas que quieren impulsar en cada uno de sus países", señaló el Ministro de Economía, Fomento y Turismo, Nicolás Grau, durante la inauguración. 

Por su parte, Sara Garrido, Presidenta de la Corporación Nacional del Mujeres, destacó el rol que han jugado en la defensa de los recursos pesqueros y sus ecosistemas. “Nosotras venimos participando activamente en diferentes actividades para protegerlos, sin embargo, no siempre hemos sido visibilizadas”. “Debemos ser capaces de generar una alianza de mujeres de la pesca artesanal que tenga por objetivo promover nuestro desarrollo, nuestros derechos, nuestro reconocimiento patrimonial y nuestra profesionalización”.

La Representante Residente del PNUD en Chile, Georgiana Braga-Orillard, destacó la asistencia técnica del proyecto Humboldt II a las mujeres pescadoras en ambos países. “Estamos apoyando el desarrollo de emprendimientos y actividades de diversificación productiva y agregación de valor en base a recursos marinos, capacitándolas en fortalecimiento organizacional y liderazgo, fomentando su inclusión en los espacios de decisión y comités de gestión; y promoviendo la formación de espacios y redes de aprendizaje e intercambio de experiencias como este encuentro”. 

Para Bettina Woll, representante del PNUD en Perú, este trabajo contribuye a avanzar hacia una mayor equidad en el sector pesca. “Las desigualdades de género impiden la participación plena de las mujeres en las oportunidades económicas y la toma de decisiones, impactando directamente en la gestión sostenible de los recursos pesqueros. Promover el reconocimiento, participación, desarrollo y empoderamiento de las mujeres del mar es fundamental para ir cerrando estas brechas”.

Para la representante de FAO en Chile, Eve Crowley, “este encuentro es una gran oportunidad para seguir trabajando en conjunto e incorporar los temas de género en todas las estrategias de desarrollo de la pesca artesanal. Estas estrategias exigen enfoques diferentes, que desafíen las prácticas discriminatorias contra la mujer”.

El proyecto Humboldt está trabajando de manera articulada con diferentes actores y actrices del sector, pescadores y pescadoras, organizaciones de pesca artesanal, gobiernos nacionales, gobiernos regionales, municipios, empresas y organizaciones de la sociedad, para fortalecer la participación, desarrollo y empoderamiento de las mujeres del sector que permita avanzar hacia una mayor equidad de género en la pesca.