Con foco en la innovación y el liderazgo de mujeres y jóvenes en el ecosistema empresarial cubano, el proyecto de cooperación que inicia apunta hacia los nuevos actores económicos en Cuba. 

La iniciativa hará enfásis en sectores relacionados con los sistemas agroalimentarios sostenibles, energías renovables, tecnologías de información y comunicación e industrias creativas y se propone contribuir a fortalecer el ecosistema empresarial cubano.

Las acciones también se orientarán a apoyar la introducción de prácticas productivas ambientalmente sostenibles, la economía circular y el liderazgo de las mujeres y los jóvenes en su contribución a las estrategias de desarrollo municipales.

El proyecto cuenta con un presupuesto de 14 millones de euros, es financiado por la Unión Europea (UE) y se inscribe en el marco del convenio de financiación entre la UE y el Gobierno de Cuba. Será gestionado por la Agencia Francesa de Desarrollo y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo y  en coordinación con el Ministerio de Economía y Planificación (MEP) e Instituto Nacional de Investigaciones Económicas (INIE), con la participación del Ministerio de Comercio Exterior e Inversión Extranjera (MINCEX), Ministerio de Comunicaciones (MINCOM) y el Ministerio de Educación Superior (MES).

MIPYME estatales y privadas, cooperativas no agropecuarias y proyectos de desarrollo local, comprometidos con procesos productivos, así como el empoderamiento económico de jóvenes y mujeres y la reducción de las desigualdades de género; serán actores y temas para los que el proyecto desarrollará sus acciones.

A través de la experiencia se aspira al fortalecimiento del sistema de innovación y al desarrollo de ideas, prototipos y proyectos, así como a un aumento de la creación y del apoyo al rendimiento de los nuevos actores económicos, haciendo énfasis en las MIPYME, en particular el empresariado femenino y las empresas dirigidas por mujeres.

Además, se propone impulsar un mayor acceso a los recursos y a la financiación de los nuevos actores económicos, con énfasis en las pequeñas y medianas empresas; así también como a la mejora del acceso de los nuevos actores económicos, en particular las MIPYME, a los mercados internacionales en las esferas relacionadas con la exportación.

Con sus resultados, se aspira a contribuir a la dinamización y revitalización económica del tejido productivo y de servicios del país y de este modo, al bienestar colectivo de cubanas y cubanos.