Inicia un nuevo proyecto de colaboración regional sobre la seguridad y la resiliencia de infraestructuras vitales ante eventos de desastre

6 de Agosto de 2024

Un proyecto multinacional para fortalecer capacidades, la seguridad y la resiliencia de infraestructuras críticas en Cuba, República Dominicana y Haití ante los impactos de eventos climáticos, comienza hoy a partir de la alianza entre el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) de esas tres naciones y con el apoyo financiero de la Coalición para una Infraestructura Resiliente ante Desastres (CDRI) en el marco del Programa Infraestructura para Estados Insulares Resilientes.

En Cuba, la iniciativa se realiza en colaboración con el Estado Mayor Nacional de la Defensa Civil, el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos, el Instituto de Meteorología y la Agencia de Medio Ambiente.

La ruta de acciones previstas en el proyecto incluye la evaluación de la seguridad de infraestructuras vitales hídricas y de educación desde un enfoque de género e inclusión en República Dominicana y Haití. Cuba, en particular, se centrará en las infraestructuras del sector hídrico.

Para ello, la iniciativa se propone facilitar la apropiación de conocimientos y herramientas por actores clave en la gestión de riesgos, con el acompañamiento de las universidades de La Habana y Villa Clara.  

Con ese fin trabajará en el diseño y perfeccionamiento de metodologías estandarizadas sobre esos temas, adaptables a las especificidades de Cuba, República Dominicana y Haití, así como en el fortalecimiento de capacidades específicas para cada país, de acuerdo con las particularidades de sus contextos nacionales.

Para contribuir con la implementación de las metodologías de seguridad y resiliencia de las infraestructuras vitales a nivel nacional y regional, el proyecto implementará programas de formación y certificación atemperados a las realidades de los tres países involucrados, lo cual permitirá elevar las capacidades técnicas de las entidades responsables en su aplicación.

Además, se enfocará en mejorar los mecanismos de coordinación regional de alerta temprana ante eventos climáticos para facilitar respuestas rápidas y eficientes ante los impactos de fenómenos climáticos en infraestructuras vitales.

En ese orden, la iniciativa también propone implementar acciones de cooperación Sur-Sur que faciliten el intercambio de información científica y buenas prácticas en torno a la reducción de vulnerabilidades, la preparación y los mecanismos de respuesta de cara a los riesgos que enfrentan las infraestructuras.

Las acciones de este nuevo proyecto tienen como fin incrementar la resiliencia de infraestructuras vitales que aseguran servicios esenciales, como el acceso al agua, de frente a los riesgos e impactos de eventos extremos, en apuesta por el bienestar de las personas expuestas a amenazas asociadas al clima.