¿Qué encontramos en la exploración con empleadores y empleadoras?
Las barreras a la formalización del trabajo doméstico desde la mirada de quienes lo contratan
18 de Agosto de 2022
En el blog anterior describimos las principales características de quienes se desempeñan realizando trabajos domésticos remunerados en Paraguay. Además, identificamos una serie de barreras a la formalización laboral que enfrenta este grupo de trabajadores.
Entre esas barreras a la formalización se encuentran potencialmente las que surgen desde el segmento empleador del trabajo doméstico. Y aquí se diferencian claramente dos aspectos: en primer lugar, el bajo conocimiento que tienen los/las empleadores/as sobre los trámites de inscripción al seguro social para efectivizar los derechos del personal doméstico, lo cual puede estar asociado a los cambios normativos recientes; y, en segundo lugar, la persistencia de un bajo reconocimiento o valorización social del trabajo doméstico, vinculado a su vez con discriminaciones históricas hacia el sector.
A partir de estas barreras identificadas, planteamos preguntas de aprendizaje que nos permiten guiar el desarrollo del ciclo de aprendizaje sobre el trabajo doméstico remunerado. En este sentido, las preguntas de aprendizaje relacionadas con el sector empleador se centraron en conocer más sobre:
- ¿En qué medida existe desconocimiento de las normativas y cómo incide esto en la formalización del trabajo doméstico?
- ¿En qué medida el desconocimiento o la cantidad de trámites dificultan la inscripción al seguro social y qué mecanismos pueden facilitar la inscripción?
- ¿Cómo afectan las creencias o valorización del trabajo doméstico que tienen los/las empleadores/as a la formalización laboral del personal doméstico?
- Finalmente, ¿cuáles son las principales barreras a la formalización identificadas por el sector empleador y cuáles son sus propuestas para superarlas?
A partir de estas preguntas, implementamos una encuesta con personas que contratan servicio doméstico. Buscando explorar y profundizar en los hallazgos previos desde su propia voz. Esta encuesta fue realizada durante el mes de setiembre del 2021 y refleja el perfil, conocimientos sobre seguridad social, trámites de inscripción y percepciones sobre el trabajo doméstico de 101 personas que contratan servicios domésticos.
¿Qué perfil tienen las personas encuestadas?
Son personas con un potencial alto de formalización de sus trabajadores/as domésticos/as. En su mayoría tienen educación universitaria de grado y posgrado (89,1%), residen principalmente en Asunción y el Departamento Central (97%), tienen una edad promedio de 39 años y un 60% son hombres y 40% mujeres.
¿Qué encontramos en la exploración con empleadores y empleadoras?
La demanda de servicios domésticos y la modalidad de contratos de servicio doméstico:
Entre los servicios de trabajo doméstico con mayor demanda por parte de los empleadores y empleadoras encuestadas se encuentran principalmente el servicio de limpieza (98%), el servicio de planchado de ropas y los servicios de lavado y cocina. También resalta el rol de cuidado de niños/as que requieren los empleadores/as (41%).
Dentro de las modalidades de contratación que utilizan para el trabajo doméstico se encuentra en primer lugar la contratación por jornal (39,6%), seguido de la contratación con retiro (34,7%) y por último la contratación cama adentro en el 25,7% de los casos.
A pesar del elevado nivel de educación y nivel socioeconómico asociado a estos empleadores, persiste un elevado grado de informalidad laboral en el trabajo doméstico que contratan. El 71,3% no tiene al personal doméstico inscripto en el seguro social (Instituto de Previsión Social – IPS), el 17,8% declara haber hecho el registro bajo el régimen general de jubilación general a tiempo completo y el 10,9% bajo el régimen de trabajo a tiempo parcial.
Conocimientos y percepciones sobre el trabajo doméstico:
El bajo grado de formalización laboral se corresponde con el bajo nivel de conocimientos sobre seguridad social y sobre trámites de inscripción al seguro social, que son confirmados por los resultados de la encuesta.
- El 44,5% de los empleadores/as no sabe o cree que es opcional la inscripción al seguro social cuando se trata de trabajo a tiempo parcial, sin embargo, la inscripción al seguro social es obligatoria independientemente de la modalidad de contrato.
- El 67,3% no sabe si el pago por trabajo doméstico puede descontarse del IVA mensual, pero la normativa no permite este descuento.
- El 51,5% no sabe si el pago por trabajo doméstico puede descontarse del IRP anual, mientras que la normativa sí permite descontarlo del IRP.
- El 51,5% no sabe o cree que no se debe firmar un contrato escrito al contratar personal doméstico, siendo que es un requisito necesario la firma de un contrato escrito.
- El 65,3% no sabe o cree que sólo se puede tramitar la inscripción de manera presencial, cuando en realidad puede realizarse de manera online.
Además del bajo conocimiento, los empleadores tienen distintas percepciones sobre la persona que realiza el trabajo doméstico en el hogar. Sólo el 41,6% considera a la persona contratada para el trabajo doméstico como una persona “que trabaja”, el 36,6% le considera como una persona que “ayuda” en el hogar y el 21,8% restante considera que es parte de la familia.
Pero veamos desde el punto de vista de los empleadores/as, ¿cuáles son las dificultades más importantes para lograr la formalización del personal doméstico? La principal barrera que identifican los empleadores para lograr la formalización es el insuficiente asesoramiento para realizar la inscripción al seguro social (65%), en segundo lugar, indican a la burocracia de los trámites (18%), seguido por el elevado costo de inscripción al seguro social (14%) y, por último, el tiempo que requieren los trámites de inscripción (3%).
La encuesta nos ayudó a comprender mejor las barreras para la formalización laboral y nos permitió reflexionar sobre formas para removerlas desde la perspectiva de quienes contratan servicio doméstico. En nuestro siguiente blog te contaremos sobre como utilizamos la metodología de la sonda cultural para profundizar el conocimiento desde las vivencias de las trabajadoras domésticas, así como los principales hallazgos que tuvimos con esta metodología.
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