En los últimos años ha surgido un rico diálogo en torno al papel que desempeñan las empresas en la configuración de nuestro entorno, nuestro bienestar y seguridad. La pandemia del COVID-19 planteó nuevos interrogantes sobre el rol de las empresas en tiempos de crisis, y sobre las condiciones en las que las grandes corporaciones sometidas a tensión deben esperar paquetes de rescate de los contribuyentes. Los consumidores, accionistas y socios comerciales exigen que las empresas hagan más para minimizar los daños y maximizar los dividendos sociales, no sólo en tiempos de expansión económica, sino también como respuesta a las crisis presentes y futuras. Por este motivo, se ha producido un importante impulso para que la práctica de la debida diligencia en materia de derechos humanos sea obligatoria para las empresas en algunas regiones y países. Existe la creencia generalizada de que el apoyo público a la empresa privada en tiempos de crisis sólo debería ir a parar a aquellas empresas que practiquen y cumplan sus compromisos con la responsabilidad empresarial. 

Esta Guía de Facilitación de la Formación ("guía de formación") proporciona módulos de formación que aclaran lo que se requiere para llevar a cabo la debida diligencia en materia de derechos humanos, centrándose en los aspectos básicos y ciñéndose a los principios acordados internacionalmente y a una terminología ampliamente entendida. Aplicando un enfoque paso a paso, permite a las empresas embarcarse en la debida diligencia en derechos humanos como un esfuerzo independiente o como parte de un proceso de evaluación preexistente.