Oportunidades hacia la eliminación de la tuberculosis en Venezuela

24 de Marzo de 2025
Graphic illustrating lungs with an abstract design, promoting World Tuberculosis Day.

La tuberculosis (TB) es una de las enfermedades más antiguas de la humanidad (Salo WL, 1994) (J, 1999). Sus orígenes datan de los años 3.700 a. C. en Egipto, siendo causante de plagas que fueron registradas durante siglos (Salo WL, 1994).

La TB era poco frecuente en el continente americano y se cree que fue introducida por los inmigrantes europeos (J, 1999). Sin embargo, hallazgos de ADN de Mycobacterium tuberculosis en momias encontradas en Perú y Colombia documentan la presencia de tuberculosis en restos humanos prehispánicos americanos (Salo WL, 1994).

La tuberculosis es causada por el bacilo Mycobacterium tuberculosis, y se transmite principalmente a través del aire, cuando una persona enferma libera pequeñas gotitas de saliva con la bacteria (al toser, estornudar, hablar o cantar). Se estima que aproximadamente una cuarta parte de la población mundial ha sido infectada con tuberculosis, sin embargo, en la mayoría de los casos, el sistema inmunológico controla la bacteria y la persona no desarrolla la enfermedad .

Normalmente el riesgo para desarrollar tuberculosis es aproximadamente del 5% en los primeros dos años de exposición, y algunos factores pueden predisponer a las personas a desarrollar la enfermedad, tales como la ingesta de algunos medicamentos, ciertas condiciones médicas que pueden debilitar el sistema inmunitario (como son el VIH, la diabetes, etc.), la desnutrición, el tabaquismo, entre otros.

La tuberculosis es una enfermedad prevenible y curable en sentido general, sin embargo, es considerada la décima causa de muerte a nivel global y la principal causa de muerte por un agente infeccioso en el mundo. En comparación, esta enfermedad es responsable de casi el doble de muertes de las ocasionadas por el VIH/Sida. De acuerdo con el Informe Mundial de la TB 2024 de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se estimaron 10,8 millones de casos en el mundo y 1,25 millones de muertes, incluyendo unas 161.000 muertes entre las personas que viven el VIH.

En el perfil país de la OMS para Venezuela (Tuberculosis profile, s.f.), se observó una tendencia al alza, desproporcionada, de nuevos casos de tuberculosis (TB) entre los años 2014 y 2020 (Gutiérrez, 2018). En este contexto, el Ministerio del Poder Popular para la Salud, con el apoyo de la Organización Panamericana de la Salud, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), el Fondo Mundial para la Lucha contra el Sida, la Tuberculosis y la Malaria, así como de otros organismos, logró contener el aumento de estas cifras. Como resultado de los esfuerzos por aumentar la capacidad diagnóstica del país en el 2024 se lograron diagnosticar 10,641 casos.

Anteriormente, Delta Amacuro, Bolívar y Amazonas por su ubicación, situación económica y acceso limitado a servicios básicos de salud, fueron los estados con mayor incidencia de casos, sin embargo, gracias a los esfuerzos conjuntos entre el Programa Nacional de Control de la Tuberculosis del Ministerio del Poder Popular para la Salud (MPPS) y el (PNUD) se ha logrado reducir significativamente la incidencia de tuberculosis en estos estados y a nivel nacional Global Tuberculosis Report, 2024).

Todo esto ha sido posible gracias a la mejora de capacidad diagnóstica en Venezuela, el acceso oportuno al tratamiento para atender los casos de personas contagiadas por TB, la provisión de la terapia preventiva, particularmente a personas que viven con el VIH, y la expansión en la utilización de equipos diagnósticos de última generación que pueden identificar en menos de dos horas la enfermedad y/o la resistencia a los fármacos para su tratamiento.

Este 24 de marzo se conmemora el Día Mundial de la TB y desde el PNUD nos sumamos al llamado de generar conciencia entre la población sobre las graves consecuencias de la TB y cómo se pueden acelerar los esfuerzos para acabar con esta epidemia en Venezuela y cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas (Objetivos de Desarrollo Sostenible Agenda 2030, s.f.). De la misma manera, poner un enfoque en la estrategia de la Organización Mundial de la Salud, “Fin de la Tuberculosis”, que busca disminuir las muertes por el padecimiento en un 90% y la incidencia (nuevos casos anuales) en un 80% a nivel mundial para el año 2030.


Carmen Figueroa es doctora en medicina, especializada en medicina preventiva y salud pública. Cuenta con más de 15 años de experiencia internacional en la implementación, monitoreo y evaluación de programas de VIH/TB. Ha trabajado para el Departamento de VIH de la Organización Mundial de la Salud en Ginebra, brindando apoyo técnico a varios países de África y Latinoamérica en el diagnóstico del VIH y de terapias preventivas de TB, y para el Centro del Control de Enfermedades en la República Dominicana, ofreciendo apoyo técnico a organizaciones no gubernamentales y autoridades nacionales en la mejora de la implementación de programas de VIH. Actualmente forma parte del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo en Venezuela como Especialista en Monitoreo y Evaluación en proyectos de salud financiados por el Fondo Mundial para la lucha contra el sida, la tuberculosis y la malaria.