Programa para la República Bolivariana de Venezuela (2023-2026)
Programa para la República Bolivariana de Venezuela (2023-2026)
15 de Febrero de 2023
Este nuevo programa para la República Bolivariana de Venezuela está armonizado con las prioridades del plan nacional de desarrollo, el Plan de la Patria, 2019-2025, el Marco de Cooperación de las Naciones Unidas para el Desarrollo Sostenible (MCNUDS), 2022-2026, y el Plan Estratégico del PNUD, 2022-2025. El programa apoya el desarrollo sostenible, el crecimiento económico inclusivo y la superación de las vulnerabilidades sociales.
Contexto estratégico
Las restricciones exteriores han afectado a la situación económica del país. La pandemia de COVID-19 tuvo una repercusión adicional en las variables económicas, la salud y la educación. Desde 2021, la República Bolivariana de Venezuela muestra signos positivos de recuperación económica y social. Se espera un crecimiento económico considerable en 2022. En este contexto, es esencial desarrollar la resiliencia de la población y reforzar los procesos iniciados para el crecimiento económico.
Un reto crucial es la consolidación de la diversificación productiva y el desarrollo de las cadenas de valor, junto con la recuperación y ampliación de la infraestructura de sistemas de servicios básicos. Otro reto es la articulación y el refuerzo de las capacidades institucionales para impulsar el crecimiento económico y mitigar los efectos de las restricciones externas. Estos retos deben afrontarse manteniendo las actividades encaminadas a fortalecer y ampliar las políticas sociales que promueven la inclusión de grupos vulnerables en función de la edad, la etnia, el género, los estratos sociales y los territorios, centrándose en no dejar a nadie atrás y en sinergia con las políticas públicas del Estado y el Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social, 2019-2025. La sostenibilidad financiera es una de las principales dificultades a las que se enfrentarán las iniciativas de protección social durante el proceso de recuperación económica.
El PNUD en el Marco de Cooperación de las Naciones Unidas para el Desarrollo Sostenible
El fortalecimiento del sistema estadístico y geográfico nacional es una prioridad para el PNUD como parte de la concepción de políticas públicas, que apoya la toma de decisiones basada en datos, así como los programas gubernamentales de reducción de la pobreza, desarrollo productivo, gestión de servicios públicos, control de la malaria y salud.
El valor añadido del PNUD es su posicionamiento y credibilidad ante las partes interesadas nacionales y su fortaleza administrativa y herramientas innovadoras, que están a disposición del país.
En el anterior programa para el país, el PNUD fortaleció las capacidades institucionales y las políticas nacionales en materia de protección e inclusión social, productividad, gestión ambiental, gestión integral del riesgo de desastres, seguridad ciudadana, sistemas de servicios públicos y la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. El PNUD reforzó las políticas nacionales y la articulación institucional para apoyar al sector productivo, el fortalecimiento de las microempresas y pequeñas y medianas empresas (mipymes) y el fortalecimiento de las mipymes dirigidas por mujeres y jóvenes mediante la mejora de la gestión empresarial, el emprendimiento y la digitalización de los modelos de negocio. Fortaleció las cadenas de valor en sectores estratégicos, como el alimentario, promoviendo nuevas herramientas de financiación y asistencia técnica. En cooperación Sur-Sur con Colombia y el Ecuador, el PNUD facilitó el intercambio de metodologías para fortalecer las capacidades empresariales. Centró sus esfuerzos en mejorar la conectividad de las comunidades excluidas. Mejoró las capacidades nacionales de gestión de la información y toma de decisiones mediante el apoyo de sistemas de información digital en materia de derechos humanos, seguridad ciudadana, gestión de datos estadísticos nacionales y gestión del riesgo de desastres.
Como proveedor de soluciones integradas, el PNUD articuló políticas públicas e iniciativas de organizaciones del sector público y privado para promover el desarrollo productivo nacional y fortalecer los medios de vida de los grupos sociales vulnerables. En el sector de la salud, el PNUD, junto con la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y la Organización Mundial de la Salud (OMS), apoyó las gestiones para responder al resurgimiento de la malaria en el país. Junto con el UNFPA, trabajó en la mejora de la respuesta para prevenir la mortalidad materna.
Sobre la base del análisis de los resultados logrados en 2015-2022 y las consultas con los homólogos nacionales, el PNUD ha integrado las enseñanzas extraídas y las buenas prácticas en el presente programa para el país. Las enseñanzas muestran que, para reducir la vulnerabilidad general de las personas en la República Bolivariana de Venezuela, son necesarios:
- un enfoque sistémico y multisectorial con respecto a los problemas públicos basado en el fortalecimiento de la gobernanza, la eficiencia, la eficacia y el cierre de la brecha digital en las instituciones públicas, así como la conectividad entre los actores nacionales para generar estrategias integrales;
- la estabilización macroeconómica del país, promoviendo al mismo tiempo un modelo de desarrollo productivo diversificado y sostenible, esencial para generar oportunidades de empleo decente y desarrollar las inversiones necesarias que favorezcan los sistemas de servicios públicos;
- el aumento de la eficiencia y el alcance de los sistemas de protección social y estrategias eficaces para reducir la desigualdad y la pobreza;
- el fomento de la financiación, la productividad y la competitividad, cerrando la brecha digital en las mipymes y vinculándolas al sistema nacional de ciencia y tecnología;
- políticas articuladas de gestión ambiental, cambio climático y gestión integrada del riesgo de desastres, necesarias para aumentar la resiliencia de la comunidad y proteger la biodiversidad;
- el refuerzo de los datos estadísticos para desarrollar una cultura de gestión de la información para la toma de decisiones y la programación y el seguimiento de resultados con base empírica;
- el fortalecimiento del enfoque multisectorial y las estrategias de prevención para hacer frente a la inseguridad ciudadana;
- y la diversificación de las fuentes de financiación para el desarrollo, habida cuenta del limitado margen fiscal y la ausencia de financiación externa en el país.
Prioridades y alianzas del programa
La visión del programa para el país consiste en apoyar a la República Bolivariana de Venezuela para acelerar el logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (en adelante, los Objetivos), contribuyendo a la construcción de una sociedad resiliente, justa y equitativa, con una vida digna, mediante la promoción de un desarrollo económico socialmente inclusivo y sostenible desde el punto de vista ambiental, que contribuya al desarrollo humano integral. El PNUD promoverá políticas sociales centradas en la reducción de la pobreza, la optimización de los sistemas de servicios sociales esenciales, la mitigación de los efectos del cambio climático y la adaptación a ellos y la gestión integral del riesgo de desastres, junto con la aplicación de medidas para la conservación de la biodiversidad y la mejora de la gestión ambiental urbana y rural con un enfoque territorial, con el fin de reducir la vulnerabilidad de la población a fenómenos socioeconómicos y socioambientales.
El programa para el país se basa en el MCNUDS y se elaboró en paralelo a él. El PNUD participó con las organizaciones del sistema de las Naciones Unidas en la elaboración del análisis común sobre el país y en la celebración de consultas con la sociedad civil, el mundo académico, el sector privado y el Gobierno para determinar y priorizar los problemas de desarrollo del país. El proceso de consulta incluyó a las partes interesadas, vinculadas a los mandatos de las organizaciones de las Naciones Unidas, y a los grupos vulnerables, haciendo hincapié en la participación de las mujeres y los jóvenes.
La teoría general del cambio del programa se basa en promover la mejora de las capacidades de las instituciones del Estado y articular con las partes interesadas formas de mejorar la eficiencia institucional en la gestión pública. La buena gobernanza a nivel nacional y local contribuirá a mejorar la elaboración de planes sectoriales, la concepción, aplicación y evaluación de políticas públicas, así como la supervisión y el seguimiento del Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social, 2019-2025, el Plan de la Patria 2019-2025, y los avances hacia la consecución de los Objetivos. Por lo tanto, la teoría del cambio postula lo siguiente.
Si se mejora la capacidad de gestión de las instituciones y los mecanismos de articulación vertical y horizontal entre los niveles de gobierno y el sector privado, el mundo académico, la sociedad civil y las organizaciones comunitarias, la población se beneficiará de: la aplicación de políticas sociales centradas en la reducción de la pobreza y el aprovechamiento del dividendo demográfico, sistemas de protección social inclusivos, un mejor funcionamiento de los sistemas de servicios básicos y esenciales y el acceso continuo de la población a los mismos, en un entorno de seguridad ciudadana, con perspectiva de género.
Si se fortalecen las cadenas productivas para generar más oportunidades de trabajo decente, ingresos y mejor acceso a bienes y servicios básicos, la población se beneficiará de un desarrollo económico socialmente inclusivo y sostenible desde el punto de vista ambiental, porque se generaría prosperidad compartida a partir de una estrategia de desarrollo productivo que promueva la innovación científica y tecnológica, el emprendimiento, la productividad y la competitividad.
Como resultado, el desarrollo económico con un enfoque sostenible podría servir de base para promover el desarrollo territorial integrado a nivel local, sin degradación ambiental de los ecosistemas marinos y terrestres, fortaleciendo la gestión ambiental urbana y rural y preservando la diversidad biológica como base para la sostenibilidad ecológica del desarrollo y la reducción de la vulnerabilidad de las comunidades a desastres y cambios mundiales, al tiempo que se mejora la mitigación de los efectos del cambio climático y la adaptación a ellos.
Las intervenciones programáticas en los ámbitos social, económico y ambiental contribuirán a la gestión integral del desarrollo humano mejorando la calidad de vida y la resiliencia de la población ante perturbaciones socioeconómicas y socioambientales y cambios mundiales y protegiendo y promoviendo los derechos económicos, sociales, culturales y ambientales a través de políticas de protección social y redistributivas que reduzcan la vulnerabilidad, la pobreza y la desigualdad, con perspectiva de género, sin dejar a nadie atrás.
El aumento de la disponibilidad de financiación interna y externa y la creación de las condiciones nacionales necesarias para fortalecer las capacidades institucionales del Estado y la reactivación del sector productivo nacional serán fundamentales para alcanzar los fines de este programa.