
Estas acciones cuentan con financiamiento del Fondo para el Medio Ambiente Mundial (GEF, por sus siglas en inglés) y apoyo técnico del PNUD
El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) ha apoyado a la Secretaría de Recursos Naturales y Ambiente (SERNA) con financiamiento del Fondo para el Medio Ambiente Mundial (GEF, por sus siglas en inglés) en la elaboración y socialización de tres nuevos reglamentos para la gestión de productos químicos y residuos peligrosos, que son:
- Reglamento para la Gestión de Sustancias Químicas de Uso Industrial (SQUI).
- Reglamento para la Gestión Ambiental de Residuos Peligrosos (REPEL).
- Reglamento para la Gestión de Sitios Contaminados por Sustancias Químicas (RESIC), junto con los valores de referencia de sustancias químicas en suelo.

Con los reglamentos referidos, Honduras podrá tener procedimientos de cómo clasificar las sustancias químicas según directrices internacionales.
La presentación de estos reglamentos se realizó en Tegucigalpa y San Pedro Sula con actores claves, como autoridades de alcaldías, gobierno central y representantes del sector privado e industrial, que tienen un rol importante en el ciclo de vida de las sustancias químicas, incluyendo en la etapa de disposición final, cuando se descartan.
"Estos son instrumentos necesarios para que nosotros podamos contribuir al buen ejercicio de la implementación de las diferentes actividades productivas, y también para que podamos regular cómo se están desarrollando las mismas. Para SERNA y el gobierno es sumamente importante que nosotros podamos asegurar que el desarrollo sea de una forma responsable y sostenible, y que esto proteja nuestros ecosistemas y el bienestar de nuestra gente"
Malcolm Stufkens | Viceministro de SERNA

Malcolm Stufkens, viceministro de la SERNA.
La socialización es una etapa importante en la aprobación de estos nuevos instrumentos regulatorios, ya que se presenta su propósito y alcance, para luego aprobarlos por la Secretaría de Recursos Naturales y Ambiente, la Secretaría de Salud y el titular del Poder Ejecutivo.
"Estos reglamentos son herramientas valiosas que nos dicen hacia dónde debemos encaminar nuestro desempeño y así estar congruentes nuestro accionar con nuevas tendencias, como la economía circular y la responsabilidad extendida del productor o del generador"
Jorge Bueso | Representante de una de las empresas del sector productivo de Honduras
Asimismo, contar con estos reglamentos implica garantizar la disposición de los recursos humanos, financieros y logísticos para la operativización. Se espera que los proyectos de reglamentos sean aprobados en el presente año mediante acuerdos ministeriales.

La presentación de estos reglamentos se realizó en Tegucigalpa y San Pedro Sula con actores claves que tienen un rol importante en el ciclo de vida de las sustancias químicas.
Realidad del manejo de sustancias químicas
En Honduras, actualmente se presenta vacíos legales en torno a las sustancias químicas de uso industrial, los residuos peligrosos y el manejo de los sitios contaminados con sustancias químicas derivados de las actividades industriales.
Existen muchas sustancias químicas circulando a nivel nacional que podrían representar un riesgo sanitario y ambiental, exponiendo su peligro a miles de trabajadores a nivel industrial y a la ciudadanía en general. Si estas sustancias químicas en su etapa final, ya como residuos peligrosos, no se manejan adecuadamente, también pueden traer consecuencias sanitarias, ambientales y legales.
Por ejemplo, la acumulación de residuos peligrosos o su vertido descontrolado puede generar sitios contaminados, lo que afecta al suelo y las fuentes de agua con potenciales efectos adversos hacia la salud y los ecosistemas.

Solo en 2017-2019 se importaron en Honduras unas 9,660,175.1 toneladas de diversas sustancias químicas, de las cuales, una mínima porción, podría estar regulada, desconociendo las prácticas y técnicas del sector importador y usuario de otras sustancias químicas industriales.
De esta misma forma, los residuos peligrosos de diversos orígenes no están siendo regulados; aún falta, a nivel institucional central como local, contar con procedimientos de licenciamiento y control ambiental para atender de una manera más profunda los procesos de manejo de residuos peligrosos.

Beneficios del fortalecimiento regulatorio
Con los reglamentos referidos, Honduras podrá tener procedimientos de cómo clasificar las sustancias químicas según directrices internacionales, conocer el universo de las que circulan en Honduras y aplicar principios de la gestión de riesgos para las sustancias.
Por otro lado, en lo que respecta a los residuos peligrosos, se adoptará la responsabilidad extendida al productor para que determinadas corrientes de residuos peligrosos merezcan un tratamiento diferenciado de los residuos comunes y se asuman los costos de su gestión. Así como la implementación de un registro de los generadores de residuos y los gestores responsables, junto con un mecanismo de trazabilidad de estos.

La socialización es una etapa importante en la aprobación de estos nuevos instrumentos ya que se presenta su propósito y alcance, para luego ser aprobados por la Secretaría de Recursos Naturales y Ambiente, la Secretaría de Salud y el titular del Poder Ejecutivo.
Por último, el fortalecimiento regulatorio incluye responsabilizar a los propietarios de sitios en cuanto a remediar la contaminación en el suelo, aguas superficiales y subterráneas, en caso de den eventos o emergencias.
"Como PNUD hemos apoyado como facilitador en el proceso de construcción de estos reglamentos. Con estas acciones estamos contribuyendo a que el país defina procesos que tienen impactos para cumplir normativas y acuerdos internacionales"
Pablo Rodríguez | Coordinador nacional del proyecto COPs4
Sobre COPs4
COPs4 es un proyecto de implementación en 8 años (2018-2025) de la Secretaría de Recursos Naturales y Ambiente (SERNA) y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), con financiamiento del Fondo para el Medio Ambiente Mundial (GEF, por sus siglas en inglés).
Se busca la aplicación de la Política Nacional de Productos Químicos (aprobada en Honduras en 2013), para cumplir con el Plan Nacional del Enfoque Estratégico para la Gestión de Productos Químicos (SAICM), el Convenio de Estocolmo sobre los compuestos orgánicos persistentes (COPs) y el Convenio de Basilea sobre Movimientos transfronterizos de Desechos Peligrosos.