En el marco de la conmemoración del Día Mundial de la Alimentación y el Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza, el Ministerio de Medio Ambiente en coordinación con el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), presentaron los resultados del apoyo brindando a las comunidades de Ahuachapán Sur para incrementar la resiliencia climática, la protección de los agroecosistemas productivos y la diversificación de los medios de vida.

La actividad denominada Resiliencia climática en Ahuachapán Sur, se desarrolló en el Área Natural Protegida (ANP) El Imposible y propició un espacio para valorar la experiencia comunitaria y el trabajo coordinado interinstitucional para el aprovechamiento del conocimiento local y los recursos ambientales que permitan aumentar la resiliencia para enfrentar los desafíos del cambio climático y evitar una mayor incidencia de la pobreza multidimensional.

Las comunidades de Ahuachapán Sur incrementan su resiliencia mediante la transición hacia prácticas bajas en emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), la restauración del suelo, ecosistemas y paisajes; la protección de fuentes y zonas de recarga hídrica, y el conocimiento local como aliado para la adaptación ante los efectos adversos del clima. Con esas acciones, se suman a la apuesta del país por cumplir con las metas nacionales y compromisos globales, como las Contribuciones Nacionalmente Determinadas (NDC, por sus siglas en inglés).

Trabajo integrado por las personas y el planeta

PNUD y FAO trabajan de manera colaborativa y complementaria con el Ministerio del Medio Ambiente para concretar las apuestas nacionales de protección del medio ambiente, responder los desafíos del cambio climático y mejorar la calidad de vida de la población salvadoreña.

El PNUD, a través del Proyecto “Fortaleciendo la resiliencia climática de comunidades rurales y ecosistemas en Ahuachapán Sur,” apoya el desarrollo de capacidades locales para implementar medidas que mitiguen los efectos adversos del clima. A la fecha, más de 10 mil personas (4,790 mujeres y 5,228 hombres) han ejecutado acciones de restauración del paisaje forestal como una estrategia clave, ofreciendo respuestas efectivas para la conservación de los ecosistemas y la diversificación de los medios de vida, enfrentando de manera integral los desafíos climáticos.

La FAO, a través del proyecto “Aumento de las medidas de resiliencia climática en los agroecosistemas del corredor seco de El Salvador (RECLIMA),” busca fortalecer la capacidad de adaptación de 50,000 familias agricultoras frente a los efectos adversos del clima en 114 distritos del corredor seco, incluyendo Ahuachapán Sur, San Francisco Menéndez, Guaymango y Jujutla del municipio de Ahuachapán Sur, donde se está brindando asistencia técnica a 1,752 productoras y productores (43% mujeres, 57% hombres y 29% jóvenes) con el apoyo de 49 Promotores/as Comunitarios (69% hombres y 31% mujeres) para la promoción de prácticas de adaptación al cambio climático que contribuyen a la conservación de los recursos suelo y agua, incluyendo la práctica de la no quema que contribuye a la disminución de riesgos de incendios forestales que pueden afectar el recurso bosque, incluyendo las Áreas Naturales Protegidas.

La actividad también contó con la participación de representantes de la cooperación internacional, cuerpo diplomático, agencias del Sistema de Naciones Unidas, instituciones gubernamentales, Organizaciones de la Sociedad Civil (OSC) y las comunidades de Ahuachapán Sur.

El PNUD continuará trabajando por ofrecer soluciones integradas sobre el clima y la naturaleza en todos los niveles, desde políticas de alto nivel hasta acciones sobre el terreno, generando logros de desarrollo para las personas y para el planeta.